R1: CAPÍTULO 8: EL EXAMEN MEDICO

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Debido al muy estricto sistema de educación que Origen y otras corporaciones establecieron en el país luego de la Gran Guerra, la tasa de alfabetización se alzo un 90% en todas las regiones, desde las grandes ciudades hasta las muchas zonas marginales que quedaron luego del conflicto.

Los únicos lugares que quedaron en total estado de abandono fueron aquellas que reclamaron las organizaciones criminales de todo el país, que desde el final de la guerra se mantenían al margen pero que en los últimos años estaban poco a poco tratando de recuperar el control de sus antiguos territorios.

Desde los reclutamientos forzados hasta secuestros y tráfico de esclavos, la mayoría de estas organizaciones comenzaban a proteger a criminales de poca monta para añadirlos a sus filas, puesto que no les quedaba de otra debido a que las juventudes del país entero estaban educándose mucho mejor, y decididas a ayudar en la Restauración.

Los dos principales exponentes de esta etapa de la Restauración eran Origen y el CEGA, que a través de la creación del sistema de Pase de Batalla permitían a miembros de todas las razas de la Gran Alianza enlistarse en los ejércitos que formaban la base de la Federación, muchos con ganas de ir a las zona de conflicto del Hemisferio Norte, a las Ciudades Guardianas, el Continente de Tirian y por supuesto, el combate a las organizaciones criminales.

Los fundadores del CEGA vinieron con la idea de probar el potencial de combate de cualquiera que quisiera integrarse a los ejércitos de la Federación, además de proporcionar dicho historial a sus naciones natales como un registro de su actividad en combate.

Sin embargo y para excluir a todo aquel miembro de una facción criminal, Origen se encargaba de monitorear de cerca a cada criatura viviente que quisiera aplicar para el Pase, llegando a tomar cientos de prisioneros que por su propia voluntad se aventuraban a la ciudad.

Esta medida doto de una capa de total seguridad a la gente de las grandes ciudades y zonas suburbanas, pues pronto comenzó a verse como estas organizaciones ya estaban marcadas y debidamente identificadas, relegándolos a las zonas más pobres o prácticamente abandonadas del país.

Y gracias a esta seguridad, cientos de miles de jóvenes podían aplicar sin ningún problema para el Pase, y comenzar su camino dentro de los brazos armados de la Federación.

Al CEGA de la Ciudad Capital comenzaron a llegar decenas de transportes cargados de paquetes de documentación, que esencialmente eran los Pases de Batalla, que no eran más que simples libros de color azul de unas doscientas páginas repletas de formatos de registros.

Llegaban desde los Distritos del Norte, todo a pedido de los Fundadores, en preparación para los eventos del día siguiente, cuando las puertas del CEGA se abrirían para recibir a todos los jóvenes recién graduados.

Para ese momento del día las puertas del CEGA estaban cerradas y no habría más combates hasta nuevo aviso, y cientos de personas se hallaban ya trabajando para preparar las documentaciones para todos los que fuesen a enlistarse a la mañana siguiente.

El Ministro se alistaba para salir, cuando en ese momento apareció una de las oficiales comisionadas de la Arena de Combate.

-...Disculpe Señor, he traído su Pase de Batalla listo, los oficiales ordenaron que los representantes de la Metropolitana, los Regulares y Origen sean los primeros en tenerlo...- Anuncio la joven oficial con voz firme mientras le extendía la mano con el pequeño libro azul.

-...No tardaron nada...- Exclamo el anciano.

La oficial respondió con el mismo tono estoico y formal.

-...Estuvieron listos desde hace seis días, Señor, los Fundadores decidieron esperar a que se dieran los últimos combates en la Arena para poder traerlos...- Espero un momento y continuó. -...En un par de horas todo estará listo para mañana...-

R: CRÓNICAS 1:  EL PAÍS DE LOS MAGOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora