Capitulo 17:
-yo soy Aria, encantada de conocerla- hago el mismo gesto de dedicarle una sonrisa falsa mientras extiendo mi mano la cual ella estrecha con una mueca ligeramente perceptible, esta vieja amargada me odia y yo a ella, es un odio mutuo y todo el mundo feliz
--mucho gusto Aria ¿queréis comer ya?- nos señala con la mirada la gran mesa del comedor que esta llena de comida sana, vamos que lo único que te puede engordar en esa mesa es la Coca-Cola ligh
-si, gracias Elizabeth- digo con educación fingida, ella asiente y la seguimos por el corto pasillo asta el comedor donde nos sentamos en la mesa mientras la señora Gibson nos sirve la comida en nuestros respectivos platos y esto se supone que es comestible, esta bruja me intenta envenenar.
****- tengo una casa en Green way, esta cerca de una cascada, podríamos hacer unas cuantas fotos allí. -después de comer hemos estado planeado los sitios a los que podríamos ir para hacer las fotos de interior y exterior para el tedioso trabajo de fotografía, me lo pasaría mejor si el trabajo lo hiciera con otra persona o sola
-si, estaría bien, yo conozco un bosque donde la iluminación es perfecta, también podríamos ir.-intento animarme un poco ya que tampoco a sido tan malo a acepción de las continuas miradas de asco de su madrastra
-de acuerdo, entonces ya esta todo planeado -me sonríe, pero yo no le devuelvo el gesto, por fin hemos acabado de planearlo todo para el trabajo, después solo tendremos que ir a esos sitios y ya estará todo terminado y no lo tendré que pasar mas tiempo con el nunca mas
-si, yo ya me tengo que ir- me levanto del sofá, cojo mi mochila, me la coloco en el hombro derecho y camino hacia la salida mientras el me sigue por detrás
- adiós Aria - abro la puerta, me giro y me doy cuenta de que me esta mirándome de arriba a abajo, parando en mis ojos, se va acercando poco a poco asta el punto que su respiración choca con la mía, cuando esta apunto de besarme me apartó bruscamente, esta ha sido la gota que colma mi poca paciencia, quien se cree!
- adiós- salgo de la casa con el corazón en un puño por la rabia que estoy sintiendo, regresaría y le cantaría las cuarenta y los cincuenta si hace falta, cree que por haber estado solo unas horas conmigo tiene el jodido derecho de acercarse a mi he intentar besarme.

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good girl?
Ficțiune adolescențiLas apariencias engañan y Aria Swan es un claro ejemplo de ello