1O | IS THAT A VISION?

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—Jem... Jem...

James Potter no sabía de dónde provenía esa voz. Tenía todo el cuerpo adolorido y los ojos le pesaban. Tras recibir de lleno un Expulso en el pecho, James había atravesado la pared y caído en el suelo de la otra habitación, el cual se rompió y el azabache aterrizó en el piso inferior. Había sido una caída demasiado dolorosa que provocó que perdiera la conciencia. Pero ahora, alguien se había acercado a él y trataba de hacer que recobrara la razón.

La figura que James lograba ver a través de sus párpados entrecerrados estaba agachada sobre él dándole unos suaves golpecitos en su rostro, los cuales no lograba sentir del todo por el dolor que sentía en todo su cuerpo.

—Vamos, Jem —susurró la chica—, levántate, sé que puedes hacerlo.

El chico se incorporó con pesar y apoyó todo su peso en sus antebrazos. Al abrir los ojos, el shock casi hizo que vuelva a caer. Frente a él, la chica le sonrió. James la observó detenidamente. Su largo cabello castaño estaba mucho más corto de lo que recordaba, más o menos a la altura de sus hombros, ya no usaba sus características camisetas de historietas y libros como "Star Wars" y "El Señor de los Anillos", pero sus ojos... esos ojos que James conocía tan bien seguían teniendo el mismo brillo divertido y curioso que habían tenido tiempo atrás.

James abrió la boca varias veces, intentando encontrar las palabras adecuadas para ese momento, pero no pudo lograrlo. La chica sonrió.

—¿Violet?

—Te extrañé, Jem —respondió la castaña abrazándolo.

James no podía entender cómo la chica estaba allí con él. Al principio pensó que era producto de la contusión que había recibido pero, cuando logró abrazarla se dio cuenta que eso era imposible. Luego cayó en la cuenta: había una sola forma posible de que Violet Spell estuviera a su lado y pudieran tener cualquier tipo de contacto físico.

—¿Estoy muerto? —preguntó el azabache tomando a la chica de los hombros y mirándola fijamente. Violet no respondió pero había algo de confusión en su mirada—. Mierda, me morí. Esto no puede estar pasando —dijo agarrándose la cabeza.

—James, eso no...

Pero James Potter había entrado en pánico y ya no escuchaba a la chica.

—Nunca le dije a Albus que lo quería. Lo último que le dije a Lily fue que era una mala jugadora de Quidditch solo porque me golpeó con una quaffle a propósito. No me despedí de papá y mamá. Y... ¡mierda! Nunca pudimos celebrar la última broma en Hogwarts y no lo haremos jamás porque me morí. Diablos soy un muy mal amigo, no puedo creer...

Pero James no pudo seguir hablando ya que los suaves labios de su novia chocaron contra los suyos. Violet había tomado el rostro del azabache entre sus manos y acariciado sus mejillas. James se sintió en el mismísimo cielo cuando pudo besar nuevamente a su novia y, tal vez, era allí donde realmente estaba.

Al separarse, Violet no soltó el rostro del azabache. Permanecieron unos segundos con las frentes juntas, retomando el aliento y mirando a los ojos que por tanto tiempo habían extrañado.

—No estás muerto, Jem. Yo no estoy muerta. Nadie lo está.

—Espera... ¿qué? ¿cómo? —preguntó James tomando las manos de Violet y sacándolas de su rostro—. Vi tu cadáver, Vivi.

La chica suspiró y se dejó caer sentada en el suelo. Abrazó sus rodillas y luego miró fijamente a James.

—Todo comenzó más o menos en enero, cuando me enteré que Nic Malfoy estaba celosa de nosotros —James la miró confundido—. Sabes que ella está enamorada de ti, Jem. Después de eso la oí hablando con Theseus Nott acerca de una profecía. Esa misma profecía que te involucra. Solo que antes no lo hacía. Theseus aprovechó los celos de Nic y la sometió a un Imperius para que me sacara del mapa. Con lo que él no contaba era con que yo estaba castigada limpiando los calderos de pociones por tu culpa —a pesar de la gravedad de la situación, James soltó una risa recordando el momento—. El día en que Nic entró al baño de Myrtle, yo ya sabía lo que estaba por hacer. Por lo que fingí mi muerte... todos lo creyeron, hasta tú —murmuró la chica limpiando las lágrimas que habían comenzado a salir de sus ojos—. No sabes lo que me dolió verte sufrir todo este tiempo. Cuando todos los aurores se fueron, volví al baño y escribí la inscripción en la pared, sabía que volverías y que lo verías.

—¿Y el cuerpo que enterramos?

—Un hechizo. No era más que un montón de tierra —fue la respuesta de la castaña.

—Lo que no entiendo —continuó el azabache mirando a la chica fijamente—, es por qué no intentaste contactarte, usando algún nombre falso, alguna calve que solo yo supiera, alguna pista.

Violet sonrió desconcertando aún más a James.

—Lo hice —dijo con una amplia sonrisa—. Violet Cornelia Spell... C.S. Pensé que podrías deducir eso fácilmente.

James iba a responder, pero luego cerró la boca y se sonrojó. Se sintió un poco idiota por no recordar el segundo nombre de su novia y también por no reconocer su escritura.

—Pero no lo hice —susurró para sí mismo.

—¿Quién más vino contigo? —preguntó Violet poniéndose de pie y estirando la mano para ayudar a su novio a ponerse de pie—. ¿Le avisaste a alguien?

—Fred, Frank y Lorcan —respondió James cuando una corriente eléctrica recorría su cuerpo luego de tocar la mano de la castaña. El azabache sonrió, había olvidado esa sensación—. Le di una nota a Albus para que le avisara a mi padre y este al departamento de aurores —Violet sonrió con satisfacción y empezó a subir sigilosamente las escaleras—. Hey, Vivi, ¿tienes idea quién está detrás de todo esto? —preguntó James mientras seguía a su novia.

Por más que no pensara que Theseus Nott era un idiota, no lo creía capaz de planificar un asesinato (fallido, por supuesto), desestabilizar una escoba, meter dos serpientes en la torre Gryffindor y secuestrar a dos alumnas por sí solo. Debería haber tenido alguna ayuda, por lo visto externa ya que, por lo poco que James lo conocía y por lo que había oído a Albus hablar de él, sabía que él no era la cabeza de ese plan.

Violet negó con la cabeza.

—No, pero creo que pronto lo averiguaremos.

Y en extremo silencio tratando de que las viejas tablas de madera del suelo de la Casa de los Gritos no crujieran bajo su peso, los dos chicos lograron subir al piso superior y mirar cuidadosamente hacia la habitación donde se encontraban sus amigos.

*****
Ayer hubo dos capítulos y hoy... Bueno, hoy les traigo este.

Estamos a un capítulo del final amores, ¿qué les está pareciendo la historia? ¿Opiniones acerca del capítulo? ¿Se lo esperaban? ¿Qué creen que va a pasar?

(-1)

-Josefina

Oh, my Violet | James S. PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora