5 de Junio de 2013.-¿Entonces Ali, vas a ir a la fiesta de Matthew?- preguntó Michelle, o "Mich" como la llamamos los amigos, en la que sería probablemente la octava vez.
-Mich, no me perdería la fiesta del "sexy" Campbell ni en un millón de años- respondí juguetonamente mientras caminaba fuera del instituto, sintiéndome por primera vez libre de obligaciones en un año. Acabado el último día de estudio, la Aline responsable tomaba unas merecidas vacaciones, mientras la fiestera e irresponsable comenzaba a trabajar, si es que a salir con amigos e ir a fiestas se le puede llamar trabajo.
-Oye perra- exclamó con los ojos entrecerrados y el ceño fruncido, pero con tono bromista-. No llames así a mi hombre.
-Nota mental "no llamar más sexy a Matthew frente a Mich, ella podría prácticamente arrancarme la cabeza si lo vuelvo a hacer"- comenté sonriendo cuando mi mejor amiga estalló en carcajadas en el momento en que ambas nos deteníamos junto a la motocicleta de su novio, donde Matthew la esperaba sonriente.
-No exageres, tan celosa no soy- dijo a la vez que me enseñaba su lengua como niña pequeña y luego tomaba el casco que el rubio le ofrecía.
-Si chica ruda, lo eres- la contradijo él, ajustando delicadamente el casco bajo el mentón de ella.
Mich solo lo fulminó con la mirada haciéndonos reír, luego se subió a la motocicleta.
-Le diré a Chase que pase por ti a las diez- me sonrió, se afirmó del torso de su novio, el cual ya estaba al volante de la motocicleta y se despidió con un gesto de la mano-. Debes estar lista, si no llegas juró que te ire a buscar a tu habitación y te llevaré a rastras a la fiesta.
Luego de eso simplemente desaparecieron al doblar la esquina.
{...}
Chase uno de mis mejores amigos me esperaba en la sala de estar mientras yo terminaba de alistarme para la fiesta. Me había puesto unos pantalones ajustados (casi como una segunda piel) una polera sin mangas que me llega debajo del trasero y que era algo suelta, y finalmente mis inseparables converse negras. Puse una capa de brillo sobre mis labios y salí de mi habitación para encontrarme con mi amigo.
-Te ves sensual Ali- comentó paseando la vista por mi cuerpo-. Un día deberías salir conmigo, ya sabes, chica sensual más chico sensual igual envidia del resto.
-¡Oh callate Chase! Eres un egocéntrico de lo peor- dije golpeándolo suavemente en el hombro, a lo que el rió y se acercó a abrazarme. Chase tenía ojos color ámbar, cabello negro, era alto y... Bueno creo que es lo que las chicas a mi edad están desesperadas por tener, a lo que llaman un chico "caliente"-. ¿No tenias nada mejor que hacer que decidiste escoltarme a la fiesta?- pregunté finalizando el abrazo.
-Si, unas cuantas chicas me esperan, pero creo que escuchar como te quejas es más entretenido, además Simón me pidió que me asegurara de que irías- respondió encogiéndose de hombros y caminando hacia la puerta de entrada.
-¿No querrás decir que fue Mich la que dijo eso?
-Se lo que quiero decir Aline, extrañamente fue Simón y se notaba que estaba algo... nervioso- abrió la puerta y salimos de mi casa. En la acera, aparcado, nos esperaba su auto. El camino a la fiesta fue silencioso porque no podía dejar de preocuparme por Simón, él rara vez se ponía nervioso, algo debió haberle sucedido.
-Ali... ¡Ali ya llegamos!- me gritó Chase sacándome de mis pensamientos, a la vez que estacionaba el auto y saliamos de el.
Tomé su mano y lo tiré en dirección a la puerta de la casa de Matthew, lo sentí temblar levemente y me extrañé porque la noche estaba lo suficientemente fresca como para ser agradable.
-¿Tienes frio?- inquirí mirando en su dirección, y rayos me preocupé un poco al ver sus mejillas sonrojadas ¿puede ser que este chico tenga fiebre?.
Me sonrió de costado, mostrandome su adorable hoyuelo y su sonrojo fue avandonando sus mejillas hasta el punto de desaparecer- No, tranquila, estoy bien, fue solo el cambio de temperatura, el auto estaba temperado-. Se encogió de hombros y entrelazó sus dedos con los mios, ahora él dirigiendo la marcha hacia el interior de la casa, ya que la puerta habia sido abierta por una chica ebria que tropezaba torpemente detrás de... otra chica ebria, con la cual se besó.
No me sorprendió, creo que a mis cortos 17 años he visto y escuchado mas cosas... extrañas que la mayoria a mi edad, además no tengo problema con ese tipo de inclinación sexual.
Chase zigzagueaba entre la multitud de adolescentes ebrios que bailaban amontonados unos junto a otros.
-¿Puedes ver a Simón o a Mich?- grité para hacerme escuchar sobre la música electronica.
-No logro ver nada- dijo junto a mi oido, causando que mi piel se erizara.
Giré mi cabeza hacia Chase, tan rápido que no tuvo tiempo de separarse un poco, causando que nuestras narices chocaran. Reí quedamente mientras frotaba mi nariz, que seguramente estaria roja.
-Eres algo agresiva- comentó, ahora mirandome con una ceja alzada y su sonrisa seductora, esa que utilizaba para "conquistar" a las chicas-. Si querias un beso solo debias pedirlo, no hacia falta golpearme, y para la próxima, seria mas eficiente tu mano que tu nariz.
Reí sarcasticamente y solté su mano para seguir mi camino, ahora dirigiéndome hacia el patio trasero. Al salir por el ventanal logré divisar a mi mejor amiga junto a su novio y Simón. Miré sobre mi hombro solo para asegurarme de que Chase viniera detrás mio.
Simón tenía un aspecto desaliñado, sus habituales gafas estaban a penas sujetas en la punta de su nariz, su camisa a cuadros rojos con negro estaba abierta sobre su pecho, mostrando una camiseta sin mangas blanca que se ajustaba a su torso. Sus pantalones ajustados estaban rotos en la rodilla izquierda y sus converse rojas estaban con barro, pero a pesar de eso se veía guapo. Me alegra pensar que puedo encontrar guapos a mis amigos sabiendo que jamás los podría ver como otra cosa.
En fin, en el momento en que me vio, sonrió y me saludo con la mano. Mich no se dio cuenta de que había llegado y Matthew se veia claramente enfadado.
-Hola chicos- saludamos Chase y yo al unísono. Matthew nos sonrió, Mich estaba aparentemente demasiado ocupada contando los lunares en el brazo de su novio como para prestarnos atención y Simón... bueno el hizo el intento de hablar pero en vez de palabras salió un eructo con olor a alcohol, lo que lo hizo tambalearse hacia adelante, suerte la suya que Chase lo atrapo antes de estamparse en el suelo. Y gracias a eso recién pude darme cuenta de la botella de cerveza que tenía en la mano, lo que es raro porque el no bebe.
-¿Por qué Simón está ebrio?- preguntó Chase quitándome las palabras de la boca.
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Okey, estoy algo [muy] feliz por poder publicar esta nueva historia que es completamente de mi invención.
Amo escribir y lo hago aún sabiendo que nadie lo leerá, pero en fin, si estas leyendo esto, es porque seguramente te topaste con mi novela de casualidad y te diste el tiempo para leerla, gracias.
Si te gustó deja tu estrellita, te lo agradecería, deja tu comentario si lo deseas, me serviria para mejorar:)
P.D: hasta el momento estoy algo enamorada de Matthew! Es como el chico rudo-tierno perfecto!
P.D: El de la foto es Chase:)
Ante todo gracias<3
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Manual del chico perfecto.
Teen FictionMi nombre es Aline Kate, tengo 18 años y les contaré la historia del verano más extraño, problemático y entretenido de toda mi vida. Resumiendo, sería algo asi: Dos chicos hormonales + una amiga probando la hierba + un manual de conquista= peleas, g...