LO QUE TE LLEVASTE DE MI

D O S

Aún recuerdo la tarde de abril, era tan cálida e inigualable, estaba sentada por la laguna de mi pueblo disfrutando de su hermoso paisaje, realmente no quería que llegara a su fin, pero siempre existe algo que nos devuelve a la realidad de golpe y nos aleja de nuestra zona de confort, a veces es difícil aceptar que en cuestión de segundos todo en nuestra vida puede cambiar, aunque duela y sea muy duro lo más seguro que tenemos es la muerte y así fue, como mi vida cambió. Aunque no me morí ni nada, pero, algo de mí sí.

- April, cariño necesito que te tomes con calma lo que te diré, a tu padre le dispararon en el trabajo, nadie comprende el motivo, pero según los oficiales fue por venganza, ya que él afortunadamente solo salió herido y no se robaron nada.

Mi corazón empezó a latir muy rápido, siempre tenía ese temor de que a papá le pasara algo, desde que tengo memoria él siempre recibía amenazas de muerte, nunca supe en qué asuntos estaba vinculado, pero lo que sí sabía es que papá no eran esos de los que se callaba y a muchos nos les conviene eso.

Flashback - Año Nuevo del 2007

-Mami quiero más de esta comida, es deliciosa- dije con una sonrisa que denotaba mis hoyuelos

-Cariño si sigues comiendo vas a explotar ya te comiste dos platos, después mañana andas mal del estómago-

-Mamá dos platos no son nada y lo sabes- ambas nos empezamos a reír, hasta que papá llegó con unas estrellitas, para que saliera a jugar con mis amigas Ana y Sofía.

-Ten cariño, vamos a reunirnos con los demás- me agarra la mano, pero antes de salir de casa le reitero a mi mamá- Volveré por el tercer plato mamá, esto no se acaba aquí- ella solo me dedica una sonrisa.

Cuando salimos de casa una camioneta negra estaba parqueada al frente de nuestra casa, un señor de tez blanca, ojos verdes y rubio sale y saca un arma. Mi papá rápidamente le dice a mi mamá que me lleve a otro lado, el señor simplemente coloca un arma en la frente de papá y me dedica una sonrisa, mientras mi mamá me alzaba y llevaba a casa ... sentía que me iba a dar un infarto, pero no era la única mamá estaba temblando.

Al cabo de unos segundos se escucha un disparo y la camioneta arranca a toda velocidad, mamá y yo empezamos a llorar, sin saber que hacer, hasta que papá llega con una sonrisa - Aún estoy aquí, de mí no se van a librar muy pronto.

Fin the Flashback

- ¿Cariño, sigues ahí?, ¿Hola? - Dice mamá, desesperada.

- Si mamá, solo dime ¿en qué hospital está? – respondo en un estado de shock, desde que era niña cuando me daban noticias muy fuertes o algo acontecía siempre me quedaba así y luego de unos minutos reaccionaba.

- Todo estará bien cariño, él es un buen y fuerte hombre- lo dice con una voz muy quebrada y es ahí cuando decido que debo apurarme para estar con ella en este momento para apoyarla, ya que mis padres eran en pocas palabras la pareja favorita de nuestro pueblo y mi gran inspiración, deseaba tanto en un futuro encontrar alguien que me ame como mi padre ama a mi madre, pero en la mayoría de veces me he equivocado y he decido dejar aún lado aquello.

Sin perder más el tiempo tomo un taxi, al subirme un apuesto chico de ojos cafés me sonríe, sin embargo, simplemente le digo a donde me dirijo, aquel solo va a toda velocidad al hospital, al pasar varios semáforos en rojo y por supuesto insultos de varias personas, antes de bajarme aquel me mira fijamente -Todo estará bien guapa- me dice aquello y al final me regala una sonrisa ¿tierna?.

Solo le agradezco e ingreso corriendo, sé que debía de estar tranquila por mi mamá, sin embargo, el miedo y los nervios me van traicionando poco a poco, ella casi no me había explicado la situación cuando llego le pregunto a una joven enfermera y me dice que está fuera de peligro en la habitación B06, al parecer la bala no perforó su corazón, por lo que inmediatamente pienso que es una advertencia pero sobre qué.

Después de subir unas 4 escaleras llego a la habitación, en su interior estaba mi padre con varios aparatos en su cuerpo y mi madre estaba sentada en el mueble llorando, cuando se da cuenta de mi presencia se levanta y me abraza.

- ¡Hija, que bien que llegaste!, tengo que decirte algo muy serio- inmediatamente mi estado de shock volvió, así que ella solo me agarró la mano y me hizo sentar a su lado en el mueble.

- ¿Qué ocurre mamá? - es lo único que sale de mi boca

- Nos mudaremos cariño, empezaremos de nuevo en otra ciudad, ya estoy cansada de vivir así, no es normal que a tu padre lo busquen en el trabajo y le disparen, existe otro motivo, pero no pretendo indagar o preguntarle a tu padre y mucho menos estar en la boca de todos, ya sabes como son.

La miro fijamente y después la abrazo, no quería discrepar sobre aquella decisión, sinceramente me daba igual si nos íbamos o no, la mayoría de mis amigos se mudaron hace meses y creo que es tiempo como familia para empezar una nueva vida.

Al pasar las horas decido quedarme cuidando a mi padre, para que mamá vaya a casa y descanse, de repente una enfermera me pide que salga de la habitación supuse que era para ver cómo estaba o inyectarle algún medicamente, sinceramente no tenía idea, porque no soy de las que suele estar mucho tiempo en el hospital, así que otra enfermera se me acerca y me brinda amablemente un vaso con agua, decido aceptarlo y por ahí mismo aproveché el tiempo para ir al baño, cuando estoy en él lo primero que hago es mojarme la cara, estaba muy pálida de repente me sentí muy mareada todo a mi alrededor daba vueltas y en cuestión de segundos me desplomé. 

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