Bienvenidos seáis todos, usuarios de Wattpad. Desde cabras que viven en el océano, hasta gente que hace alusión a violadores del bosque, pasando por aguacates que toman la sombra bajo bonsáis.
Este es un blog que he decidido publicar bajo la firme apariencia de un gato que quiere dominar el mundo (mentira, en verdad os quiero aniquilar a todos) llamado Preto. El motivo es simple: porque me da la gana. Bueno, también porque quería abrirme un poquillo con todos vosotros. Además, gracias a esto puedo mostrar mi fanatismo o expulsar mi bilis hacia lo que detesto, y ser más cercano con la gente de la plataforma.
Para empezar qué mejor manera que hablaros de lo que me gusta/amo y lo que no me gusta/odio. Todo esto está basado en mi más humilde y gatuna opinión, así que no tiene por qué ser la realidad. No meteré mi punto de vista objetivo —aunque es posible que a veces se me escape—. Aclarado todo esto, bienvenidos de nuevo a mi blog, sensuales humanos (y cabra).
Podréis diferir en todo, por supuesto, tanto aquí como en cualquier otro apartado. Pero aviso: hacedlo con educación y nada de insultos, o me cabreo y utilizo vuestra cara como afila garras. Puedo averiguar dónde vivís, ¡la policía nunca sospecharía de un gato tan adorable como yo!
Cosas que no me gustan/odio
1. Doraemon
Vamos a empezar con la serie de la infancia de muchos, que hasta yo la veía de cachorro.
No aguanto Doraemon por muchos motivos. El primero es ese exceso de violencia sin sentido por parte de Gigante, una persona que es más tóxica que Chernobyl, primero porque hay que lamerle el culo a cada rato, segundo porque es una persona dominante, egoísta, esclavizadora, etc. Pero lo que más me repatea es que sea AMIGO de Nobita. ¡¿Quién se hace amigo de su agresor?! ¡¿QUIÉN?
Luego está Suneo, otro personaje tóxico que presume de todo lo que tiene, y le restriega a Nobita sus planes de viaje sólo para decirle expresamente que no irá con ellos. Y si les termina acompañando es para burlarse de él, porque no sabe nadar o porque le dan miedo los fantasmas, etc.
Lo más recalcable es que Nobita, incluso en el papel de víctima, no se libra de ser otro personaje tóxico que se burla de los demás. Engaña a Doraemon para robarle sus aparatos, los utiliza a su antojo para vengarse o aprovecharse del resto para su propio beneficio, a veces a través del chantaje. Al final, vemos que hay un montón de críos que utilizan y engatusan al resto. No digo que haya que meter valores moralistas en las historias, pero si vas a enseñar algo, por lo menos no muestres a gente que engaña, maltrata, extorsiona —y más— a otros. Para hacer eso quédate quieto.
Como no quiero enrollarme mucho más diré por último que hay muchísimo sexismo aquí. No olvidemos la sexualización hacia Shizuka y su obsesión por bañarse (¿es que quiere arrancarse la piel o qué?), momento idóneo para verla desnuda. Y esos roles de género, de cómo Nobita, por ser el hombre, tiene la obligación de cuidar a Shizuka tras casarse, siendo esta relegada al cuidado de la casa y los hijos por el simple hecho de ser mujer. Una persona inteligente y con cultura, pero claro, mejor nos centramos en que sabe limpiar y cocinar, ejem, ejem.
ESTÁS LEYENDO
El blog del gato Preto
RandomUn apartado donde colocaré cosillas sobre mí, mientras planeo mi intento de destrucción mundial. Digo, mi intento por parecer adorable para vosotros, mis queridos humanos.