Un apartado donde colocaré cosillas sobre mí, mientras planeo mi intento de destrucción mundial. Digo, mi intento por parecer adorable para vosotros, mis queridos humanos.
Ya está aquí, siervos humanos, tras un año por fin ha llegado. Sé que esta es la entrada que más os gusta de este blog gatuno, porque los gatos somos tiernos y tenéis un fetiche extraño con lo adorable pero maligno. Así que voy a comenzar por las cosas que amo y luego sigo con las cosas que odio, lo mejor para el final.
Tras todo este tiempo he descubierto nuevas cosas que deseaba meter en este apartado, así como otras que me dejé anteriormente. Esta vez voy con dosis extra de odio y amor, por lo que preparad las puñeteras palomitas, leñe, que lleva la bolsa esperando a que la metas en el microondas desde hace dos horas.
Cosas que AMO
1. Harry Potter
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Harry Potter es una saga que cuanto más la analizo más me doy cuenta de lo mal hecha que está. Porque a ver, suponiendo que los muros de Hogwarts son lo suficientemente anchos para que el basilisco no los reventara al pasar por ellos, ¿qué cojones comía? ¿Y de dónde salió el bicho ese?
Aparte de ese y otros muchos errores que tiene la saga, creo que no puedo terminar esto sin comentar mi deus ex machina favorito: ¿sólo yo veo raro que unos adolescentes puedan colarse en el Ministerio de Magia cada vez que les entre en gana? O sea, se cuelan siempre que quieren, y lo entiendo en parte porque Ron tiene a su padre trabajando allí, aunque en el quinto libro me encantó la memoria fotográfica de Harry. Es decir, literalmente el tío se acuerda de la clave para entrar al Ministerio nueve meses después de haberla visto así de casual, la cual ni apuntó ni se esforzó por recordar en casi un año. Eso sí, luego los exámenes los suspendemos (aunque viendo que allí aprueba todo el mundo, yo creo que en Hogwarts el nivel de las clases es el de primero de primaria, porque no repite nadie aunque sea más tonto que el pomo de una puerta).
Podría seguir hablando de esto pero eh, que a mí esta saga me sigue encantando. Recuerdo que de pequeño me inflé a ver las dos primeras películas (en parte porque la tercera ni estaba). Luego ya lo dejé, y cuando acosé a mi ex para que me regalara el primer libro me dio el venazo de nuevo de Harry Potter y aquí estamos, que he visto las películas dos o tres veces, De esta saga es imposible que me canse. Eso sí, me encantó el tema de la amistad, con sus peleas y odios, pero también no poniéndola como algo empalagoso en plan poder mágico de la amistad que todo lo resuelve. Es un factor importante en la saga porque no todo es amoríos y romances, que hay muchas formas de amor, y siempre estarán los amigos para quererte y apoyarte, no solo tu maravillosa pareja en la que gira todo tu mundo.
Mi crush es la gata que aparece al inicio de la primera película.
Grrrr ( ͡° ͜ʖ ͡°)
2. El castillo ambulante
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