Deseos Antes De Morir 🍒

16🍒

—¿Puedes hacerlo?—preguntó acariciando el rostro de la chica.—¿Lo puedes prometer?

—Lo prometo. —contestó segundos después aún sin saber que estaba diciendo.

Dos golpes en la puerta y la voz del más joven de los chicos causó que se separaran un poco, y después de un «adelante» el menor entró.

—¿Interrumpo? —preguntó alternando miradas entre los presentes.

—No. Ya terminamos de hablar, bebé. —habló Luke dirigiéndose a su roomie. —Que descansen.

Todos en la casa estaban acomodándose para dormir, pero entre ellos había una persona que realmente la felicidad no cabía en ella. Y, claramente era Dayane.

Josh era quien más sabía sobre el casi enamoramiento de la chica sin necesidad de que ella le contase, pero aún así en él existía la necesidad de escucharlo salir de la boca de ella -algo así como la amiga chismosa que todos tenemos- solo que en este caso era el amigo y no se iba a quedar con las ganas de escucharlo, algo debía hacer.

Se encontraban ya los dos acostados y el único sonido que habitaba en el lugar eran las respiraciones de ambos. Los dos se ocupaban pensando en sus cosas y el aburrimiento y falta de sueño en Josh lo llevó a investigar sobre los sentimientos de Dayane, así como lo deseaba desde hacía algunos días.

—¿Puedo preguntar algo?

—Ya lo hiciste, tonto. —se burló ella.

—Me refiero a... otra cosa —contestó él con una pequeña carcajada.

—Pues, pregunta entonces.

—No me vayas a golpear ¿Eh? —dijo empujando suavemente su hombro.

—Ya lo veremos, chico. —respondió devolviendo el empujón.

—Lucas y tú...mm ¿Están saliendo?— cada palabra salió rápidamente y de una manera divertida.

Dudó unos segundos su respuesta y antes de contestar el chico a su lado volvió a hablar —¿Sabes? Eres muy obvia, o al menos para mí, tal vez Ben, Mike y Steve son lo suficientemente idiotas para no darse cuenta, pero es obvio que te gusta Luke, ¡Vamos Dayane! No puedes negarlo. —habló entusiasmado.

—Eres un idiota. —contestó entre risas.

—Entonces...¿Lo admites?.

—Tal vez, pero ya duerme hombre. Pareces vecina chismosa.

Riendo ambos se acomodaron nuevamente para dormir hasta que lo lograron. No hasta la próxima mañana cuando unos pequeños empujoncitos y susurros intentaban despertar a la joven que plácidamente dormía.

—Nena..hey, Dayane despierta. —Luke intentaba despertar a las seis de la mañana a una chica que solía despertar a las diez. Mala idea.

Minutos intentándolo para que la chica despertara de la manera más agresiva posible.

—¿Qué demonios quieres? —contestó en un grito el cual Lucas calló al instante.

—Shh, calla. Vas a despertar a todos en la casa, tienes diez minutos para cambiarte, quiero mostrarte algo. —habló en un susurro con una sonrisa pícara que lo hacía ver más sexy. —Te espero abajo.

Con esto salió de la habitación dejando a la chica con dudas pero obedeciendo a las órdenes que se le acababan de haber dado.

Dayane Smith.

Aún con sueño me levanté cautelosa para buscar unos jeans y algún suéter para disminuir el frío mañanero, no planeaba bañarme. ¡Eran las seis de la mañana!