YOUR MINE

CAPITULO 16

Cuando embarcaron, Levi  se fue sólo, ignorando ppr completo al omega.

Eren lo siguió.

-Levi...-Le tomó del brazó-No me ignores, por favor...-

-...-Lo miró de soslayo-Dejame...-

-N-no, eres mi alta, no puedes dejarme-

-...- Se soltó-Dejame sólo, Eren. No quiero verte-fruncio el ceño.

-P-pero...-

-Te dije-Lo tomó de las vestimentas y lo alzó-que me dejaras tranquilo, ya decidiste por ti mismo, ahora a mi me toca hacerlo-lo soltó-y decidí estar lejos de ti...- Se alejó caminando rápido.

-Levi-Susurró-¡Levi!- Iba a correr, pero sintió un agudo dolor en su cuerpo-¡Mmha!-cayó al suelo-...- Se quedó mirando sus sucias manos por la tierra y sangre seca.

-¡Eren!-Armin fue a ayudarlo-¿Qué te pasó, Eren?- Estaba muy preocupado-¿Por qué Levi se fue?-Trató de sobreponerse con él.

-Creo que cometí un error, Armin-bajó la mirada-Por favor, ayúdame a llegar a casa-

-Claro, te ayudaré lo necesario, Eren-Comenzaron a caminar juntos.

Iban a llegar a la casa de Levi, pero al intentar de abrir la puerta, se dieron cuenta de que no se abría. Había algo obstruyendo.

-¿Qué sucede? No deja pasar, esto es extraño-Armin estaba preocupado.

- Es mi  culpa, todo es mi culpa-comenzó a llorar-Maldición-se quitaba las lágrimas, ya que estas le ardían.

-Te ayudaré, Eren-Fruncio el ceño y se dirigieron a otra parte.

Armin dejó a Eren en la orilla del río, fue a su casa por ropa nueva.

Al regresar, Eren estaba en el mismo lugar, con la misma posición.

-Debes lavar tu cuerpo y ponerte estas prendas-las dejó de lado-¿Eren?-De fijo en el chico.

-Si, lamento todo esto, Armin-se puso de pie con dificultad.

Quitó de a poco la ropa que cubría su cuerpo, quejándose por los dolores que sentía.

Entró al agua para lavar su cuerpo, era uno de los dolores más intensos que había sentido.

La suciedad costaba de salir, así que debía frotar con fuerza.

Armin sólo lo observaba con lastima.

-Tus cicatrices a penas se notan-comentó el rubio.

-Tu me ayudaste bastante, eres una gran persona, Armin-Salio del río y se puso de a poco la ropa-¡Mhg!-Trataba de aguantar el dolor.

-Dejame ayudarte, Eren-Se le acercó para brindarle ayuda.

Eren se vistió por completo y nuevamnete con apoyo de Armin, fue al centro para buscar a Levi.

-¡Estas más fuerte!¡Eres un guerrero fascinante!-

Eren y Armin fijaron sus miradas en el Alfa de cabello azabache.

Este hablaba con unas omegas, estas le tocaban los brazos y le coqueteaban.

Al ver al omega malherido, se rieron, Levi no lo miro en ningún momento.

-Necesitas a un omega de verdad, Levi... Eres un gran guerrero-tomó la mano del alfa-vamos a disfrutar-

-Si-Entro a una casa junto con más omegas.

-E-eren...-Armin lo miró preocupado.

-...-Observaba todo con los ojos rojizos y cristalinos, su cuerpo temblaba-¡Me tengo que ir!- Se soltó de Armin y comenzó a correr.

-¡Eren!¡No corras!¡Puedes dañarte!-Iba a seguirlo, pero un alfa lo detuvo-¿Qué haces?-Fruncio el ceño.

-Te llaman, debes alimentar al hijo del Rey...-Comenzó a caminar sin soltar el brazo del joven rubio.

No pudo hacer nada.

-¡Aah!-Eren lloraba mientras corría-¡Nhga!- Se tropezó y cayó al piso-mmhg...- le dolía mucho su cuerpo.

Ladeo su cabeza.

Ahí estaba uno de los alfas solitarios.

-Levantate, omega...- Se le acercó-¿Hiciste todo eso por nada?-fruncio el ceño.

-N-no te interesa-Se sentó-Esto es horrible... Pensé que tome la decisión correcta, pero tal vez me equivoque...-Abrazó sus piernas.

-¿Y eso que?-Lo pateo levemente-¡Levantate!-

-¡Ah!-se quejó por el golpe y se puso de pie-¡¿Por qué lo hizo?!-

-¡Porque los omegas de aquí son fuertes!¡Son valientes!¡No lloran por mierdas estúpidas!- Dejó sus manos en los hombros del pequeño omega-si quieres ser de aquí, debes a aprender ser fuerte...-

-¡Entonces debe enseñarme!-

-Claro que no, yo no te voy a enseñar nada-apartó sus manos y cruzó sus brazos-Todo eso debes aprenderlo por ti mismo-Se alejó.

-¡P-pero!-

-¡Gerda!-Al gritar, la loba del hermoso pelaje blanco se acercó-Con ella te bastará...- se alejó.

-Nile-susurró el nombre del pelinegro-Gerda-Fijó su vista en la loba.

El can lo miraba con intensidad y se le acercó.

Eren le acarició el pelaje.

Juntos comenzaron a caminar hasta el bosque.

Eren quería ser un gran omega, pensaba que con Gerda podría lograrlo.