𝐬𝐭𝐨𝐧𝐲 𝐫𝐞𝐜𝐨𝐩𝐢𝐥𝐚𝐜𝐢𝐨𝐧𝐞𝐬

hospital

Una figura borrosa se movia a su lado. Solo logró mantener los ojos abiertos por un segundo pero fue suficiente para distinguir al hombre que lo rescató alejándose por el bosque. Sus pulmones dolían debido a la inhalación de agua, una sensación de quemazón instalada en su pecho. Se sintió balbucear y toser, el agua expulsada recorriendo sus mejillas y los costados de su boca, perdiendose por su mandíbula. Aun asi todo parecía tan efímero al estar al borde de la inconsciencia.

Poco a poco su cuerpo dejaba de percibir el dolor provocado por las heridas de bala en su abdomen, su cara se sentía entumecida, los rapones en sus mejillas ni siquiera parecían estar ahí. La oscuridad dentro de sus párpados cerrados aumentó y finalmente cayó dormido.

Cuando despertó le resultó dificultoso abrir los ojos, frunció el seño confundido sin recordar los hechos recientes, que luego de un par de segundos, llegaron a su mente como cascada. Miró hacía ambos lados y al hacerlo pudo sentir como un cable hacia cosquillas al rozar con la piel de su cuello. El dolor físico que había sentido anteriormente también volvió, aunque en menor medida. Se encontraba semi recostado sobre una cama mullida, pudo sentir el tacto de las sábanas debajo de sus brazos asi como también logró distinguir la melodía de fondo que se escuchaba en la habitación de hospital.

-A tu izquierda.

Sam Wilson dejó de observar la revista que tenía entre sus manos para dirigirle la mirada. Le sonrió y Steve trató de devolverle el gesto. La comisura izquierda de su boca reclamó por el esfuerzo que trató de hacer.

-Yo que tu no lo intentaría. Tienes unos puntos allí. Y ahí también, y ahí- le dijo su amigo señalado su mejilla, luego su brazo derecho y por último su abdomen.

Abrio la boca para decir algo nuevamente pero nada salió, su garganta se encontraba seca al igual que sus labios. Sam pareció entenderlo porque se levantó en busca de un vaso con agua y se lo alcanzó. Steve soltó un suspiro luego de terminar su bebida.

-¿Qué sucedió? ¿Todos estan bien?

-Todo salió de maravilla Capitán. Los helicarriers fueron destruídos, los blancos estan a salvo y tu estas vivo asi que se podría considerar un éxito... Excepto porque nuestro hombre gótico escapó.

-¿Bucky?

A su mente volvieron las imagenes de la pelea en las alturas, la confusión en los ojos de su amigo cuando le dijo la misma frase que él solia decirle cuando eran jóvenes. Las imágenes borrosas de un hombre con espalda ancha y vestimentas oscuras sacándolo del agua. Una pequeña esperanza de que su compañero de guerra lo haya podido recordar emergía en su pecho.

-Ese mismo. Pero tranquilo Cap, lo seguiremos buscando.

En ese momento entró una enfermera a la habitación para cambiar la benda de su brazo, detrás de ella ingresó Natasha con una media sonrisa en su rostro, esa que Steve se acostumbró a ver seguido.

-Hey, miren quien despertó. Pensé que dormirías por otros setenta años.

-Hilarante, como siempre.

Steve le sonrió debil y Natasha se acercó para depositar un beso en la frente del rubio y acariciar los cabellos que caían hacía delante con mucha delicadeza. Sam salió de la habitación tomando su celular y dedicándole un pequeño saludo con su mano que Steve le devolvió en una mueca que pretendía ser sonrisa.

-Estoy feliz de que te encuentres bien.

-Gracias Nat. ¿Como se encuentra tu hombro?

-Perfecto- ella le dedicó una pequeña sonrisa y movió un poco la parte en cuestión para demostrarlo.