𝐬𝐭𝐨𝐧𝐲 𝐫𝐞𝐜𝐨𝐩𝐢𝐥𝐚𝐜𝐢𝐨𝐧𝐞𝐬

la casa de clint

Tony miró a la mujer delante suyo con un gesto de incredulidad, le tomó un par de segundos poder comprender que no se trataba de una broma que seguramente su compañero le pidió a su esposa que haga. Justo frente a él, Laura Barton le tendía un par de sabanas que parecían bastante abrigadas, aún asi, Tony pensó que se encontraban cerca de la temporada primaveral y dudaba que fueran necesarias.

Vio como la señora Barton le acercaba las sábanas un poco más, en un gesto que indicaba que quería que Tony las agarre de una vez. Luego de un par de segundos más, eso fue lo que el castaño hizo.

-Su habitación es la última a la derecha por el pasillo, si no me equivoco el capitán Rogers ya se encuentra allí.

Anthony tragó duro antes de apretar la mandíbula. Cuando escuchó como Clint hablaba de que algunos tendrían que compartir habitación nunca pensó que eso lo incluiría a él. Al caer la noche, lamentablemente, descubrió que no se trataba de una broma pero pensó que quizás podría convencer a Natasha de que fuera su compañera, lo cual no resultó ya que la mujer le respondió que dormiría con Bruce. Ahí se iba su opción número dos, su hermano de ciencia lo había cambiado por las primeras piernas que se le cruzaron por delante, aunque no podía juzgarlo, eran un buen par de piernas.

Thor había partido, Clint dormiría con Laura, obviamente; y la habitación restante era de los pequeños hijos de Barton. Debido a todos esos factores, Tony Stark y Steve Rogers dormirían en el mismo cuarto. Esa fue una oración que el castaño jamás creyó que pensaría.

Gesticuló un pequeño "gracias" y le devolvió el saludo de buenas noches a la mujer.
En el camino por el pasillo hasta el pequeño lugar en el que pasaría las siguientes horas al lado de la persona con la que menos congeniaba, Tony rogaba que Steve ya estuviera dormido. Mayormente porque bueno, quería evitar una discusión o momentos incomodós; pero como el mundo estaba en su contra, al entrar pudo ver al soldado sentado en una punta de la cama que se supone iban a compartir. Los ojos azules estaban muy abiertos y no parecían tener intenciones de querer cerrarse para descansar.

-Te estaba esperando.

Steve se paró en cuanto vio al castaño entrar con un par de mantas en sus manos.

-¿Te asusta dormir solito?

-De hecho, me encantaría dormir solo pero no siempre consigo lo que quiero.

-Aunque no lo creas, esta vez, yo tampoco.

Tony dió unos pasos dirigiéndose hacia la pequeña cama de dos plazas donde depositó las sábanas que Laura le había entregado.
Todo esto parecía tan surrealista, Anthony jamás se habría imaginado, ni en sus sueños más locos, que algún día se encontraría en una situación como aquella, y mucho menos con Steve. Bostezó y sus ojos se aguaron, su cuerpo pedía a gritos que descansara de una buena vez.

-Bien ¿Como haremos esto, grandote? Te aviso que para mi no existen lados, así que de alguna forma u otra voy a terminar en el medio de la cama y por end-

-Esta bien Tony- Steve cortó el parloteo del castaño-. Trajiste mantas así que creo que podría dormir en el piso. Después de todo lo hice en el ejército, no sería nada nuevo.

Tony no iba a dar objeciones a eso. Era genial, no se tenía que preocupar por dormir al lado de su compañero.

-Buena idea Capi. Toma- tomó las mantas nuevamente y se las tendió a Steve.

Tony comenzó a desvestirse mientras que el rubio tendia las sábanas en el suelo. Pensó qué tan malo sería si dormia desnudo como acostumbraba, nah eso sería demasiado. Optó por dormir con sus boxer y se colocó una remera de Barton que estaba colgando en una silla de la habitación. Cuando se metió a la cama notó que el rubio estaba comenzando a desabrochar el jean que traía puesto. Tony tuvo una vista perfecta del trasero redondo de su compañero, pero avergonzado, bajó la mirada casi instantáneamente.