Hate, Love, Hate... Saranghae❣【WooHo 】❧

C a p í t u l o 2 6

--Que tú... ¿qué?-- Frotó su cabello con su mano, desordenándolo un poco a causa del repentino cambio en sus planes.

--Dije que las olvid-...

Lo interrumpió, -- ¡ya te escuche! ¡Aah!--Alardeo, --¿Sabes qué? Vamos...

Tomó la mano del pelinegro y lo arrastró, su departamento estaba en la parte de arriba y estaba muy cansado como para reclamarle del porque olvido las llaves. Si llegaban sin que se cayera o su peso le aplastara... Estaría malditamente feliz.

Su mano inmovilizada dolía, dudaba que con una pastilla de analgésicos calmara su dolor, por lo que tomaría dos. Tal vez con eso logre dormir bien.

Se detuvo frente a su puerta, ahora feliz por llegar, un paso menos en el problema.
Metió las llaves y dejo que esta se abriera por completo, luego de jalarla al exterior, la sostuvo con su cadera jaló a WooSeok, permitiéndole entrar sin que la puerta lo bloqueara.

Una vez dentro, la puerta se cerro automáticamente, dejándolos en un espacio reducido para quitarse los zapatos y seguir el recorrido.

--Vamos grandote... Levántame una pierna... Bien, así.

Acomodó sus zapatos y los de WooSeok en el pequeño mueble, un suspiro cansado le dominó.

Miro a WooSeok y este tenía un puchero.

JinHo lo miro con asombro. --¿WooSeok..?

--Si a ti no te ¡hip! Gusta que te hablen de tu altura... A mí tampoco.

Se rió nasalmente, antes de palmear el pecho contrario. -- Bien, bien. No lo volveré a hacer. Ahora...-- Tomo nuevamente la mano del alto, sorprendiéndose de lo grande que era a comparación suya. WooSeok apretó el agarre, tomando atención de JinHo, haciendo que el menor levante la mirada, haciendo que la diferencia de altura se convierta en uno de los mejores espectáculos, se miraron con asombro, cariño... Con un deseo que aun ninguno de ellos sabía.
Estuvieron mirándose fijamente antes de que el menor rompiera con el momento. --Vamos... Tenemos que dormir.

WooSeok no dijo nada, se dejo llevar por el pequeño pelinaranja, sabía que esto era una forma de pago por la vez que lo había cuidado, sin embargo, no sabía cuanto tiempo le demoraría soltar la verdad, sus llaves estaban en el saco... Y ese saco lo tenía en su brazo, cargándolo.

--Bien...-- JinHo mordió su dedo pulgar cuando el alto estuvo frente a él sentado, sumiendo las sabanas y el edredón con su peso. --¿Quieres quitarte...? Mierda, ¡Ya sé!

Corriendo sin darle la oportunidad a Woo de pensar claramente que era a lo que se refería, se esfumo tras el armario, dejándolo mudo. Miro su camisa y fue desabotonado con tranquilidad, se sentía raro.

Extrañamente feliz, pero raro.

--O-oh...-- JinHo freno cuando regreso, sus mejillas y su lógica estaban en una lucha a muerte por no sacar un sonrojo. El pecho del alto estaba al aire, su camisa colgaba de sus hombros y dejaba ver sus clavículas. ¡Oh, santo cielo! JinHo estaba celoso de lo bien que se veía aún con poca ropa.