Capítulo 5: Recuerdos

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Jade se aclaró la garganta mientras miraba a sus dos amigas, ellas estaban muy emocionadas, cada una sentada con las piernas cruzadas y un bol de palomitas junto a unos refrescos. La de cabello rosa suspiró.

- ¿Podríais dejar de mirarme así? Es incómodo - dijo la morena, apartando un poco la mirada.

- ¡No puedo evitar emocionarme! - exclamó la más joven de las tres - Estás confiando en nosotras para contarnos un secreto personal tuyo.

Jade suspiró un poco y se estiró en la cama.

- Cuando tenía 4 años yo ya conocía a Roma, ibamos al mismo jardín de infancia y nuestras madres nos llevaban al mismo parque - comenzó a explicar, recordando todo aquello con una sonrisa nostálgica - Él siempre estaba corriendo tras un balón y yo lo miraba desde lejos - al decir eso pausó un momento, tomando aire - Aunque nuestras madres fueran amigas, aunque fuésemos a los mismos lugares, él y yo no nos podíamos llevar bien, siempre salía con alguna tontería suya y yo acababa llorando - dijo frunciendo levemente en ceño.

- Sinceramente, no puedo imaginar a Jade llorando - dijo Rosie, riendo un poco.

- Calla - dijo Jade con un leve rubor en las mejillas y siguió contado - Un día, mientras Roma jugaba con unos amigos suyos yo estaba en lo alto de un tobogán, uno se los amigos de Roma subió al tobogán y sin querer, o eso quiero creer, me empujo de lo alto del tobogán - explicó.

- Eso debió doler mucho - dijo Skie con expresión de dolor.

- Me disloqué el hombro - dijo Jade con relativa tranquilidad para lo que explicaba - Cuando vieron que no paraba de llorar el amigo de Roma se fue asustado - continuó explicando - Pero él se quedó, se sentó a mi lado y me ató esto - dijo señalando la cita que tenía en la cabeza - En la muñeca mientras me decía que no llorara, que todo iba a estar bien - tras decir aquello una leve sonrisa se dibujo en su rostro -  Después de aquello no lo volví a ver por el barrio. Mi madre, tiempo después, me explicó que se había mudado a otra zona y cuando lo volví a ver en la secundaria él ya no me recordaba - dijo sentándose con las piernas cruzadas en la cama.

Skie y Rosie la miraba con una mezcla de tristeza y emoción, cogiéndose las manos, mirándola atentamente.

- Es decir - empezó a hablar Rosie - Te enamoraste de él cuando eran niños y tu amor a perdurado hasta hoy - dijo con expresión tranquila - Una bella historia de romance infantil.

- ¿Pero de verdad él no recuerda que se conocieron cuando eran pequeños? - preguntó la más joven de las tres mientras se echaba un puñado de palomitas en la boca - Podría estar haciéndose el loco - dijo con la boca llena.

- Créeme, se le olvidó - dijo la de piel morena cogiendo una palomita -  La verdad, nunca creí que lo volvería a ver y menos que me acabaré enamorando de él. No estoy segura si sentirme como una idiota o como un afortunado - digo entre risitas - Basta de historias cursis, he alquilado un par de pelis de terror, así que preparaos - dijo encendiendo la televisión.

- Jade...gracias por compartir tu historia con nosotras - dijo Rosie con una sonrisa calmada.

Jade sonrió de vuelta y puso una de las películas, riendo al ver a sus amigas abrazándose a sus brazos pero el mido.

- Chicas, si la película aún no comenzó - tras decir aquello empezó a reír.

La risa fue interrumpida por el inició de la canción "Feels", Jade miró el teléfono confundida y contestó.

- ¿Diga? - preguntó ella.

- Jade, podemos hablar? - preguntó la voz de Roma desde el otro lado de la línea - Estoy frente a tu casa...

Jade se levantó de golpe, asomándose por la ventana de su cuarto, viendo al moreno de cabello negro frente a su casa.

- ¿Qué...? - preguntó Jade confundida.

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