Pov Lauren.
Me encontraba en los baños de la escuela porque recién acababa de terminar el entrenamiento de fútbol, las practicas han estado muy pesadas pero como no van a estar así si faltan 2 semanas para el torneo interescolar de fútbol. Además soy la capitana y goleadora del equipo, y tengo que estar en óptimas condiciones y dar mi cien por ciento para ganar el torneo.
La mayoría de las chicas ya habían salido de los baños, solo quedaban cuatro chicas cambiándose de ropa, así que guarde mis cosas y saque mi ropa extra para bañarme, me metí a la regadera y abrí el grifo, el agua empezó a caer por mi cuerpo y en un segundo me sentí fresca.
Cuando salí de la ducha vi que ya ninguna chica de mi equipo estaba, así que empecé a vestirme, siempre espero que la mayoría de ellas se vayan porque aunque aceptan mi intersexualidad a mi me pone incomoda y no quiero que piensen que las veo demás o algo así, a parte tengo novia y nunca la traicionaría, odio las infidelidades.
Cuando me estaba poniendo la remera cuando siento que alguien bajo mis Jeans.
- ¿pero qué mierda? - dije asustada y me baje la camisa totalmente solo para ver a Alexa de rodillas frente a mi miembro aún cubierto por mis boxers.
- esas son formas de hablarle a tu hermosisima novia - dijo Alexa volteando los ojos.
- solo me asustaste un poco - le dije e intente agacharme para agarrar mis shorts y subirlos pero Alexa me lo impidió.
- no, no, vamos a jugar un rato - dijo con mirada lasciva y poso sus manos encima de mi miembro.
- Alexa ya hablamos de esto - dije un poco molesta y alejando sus manos.
- ¿qué mierda Lauren? ¡Somos novias! Es normal que tengamos sexo - dijo molesta.
- lo sé, pero este no es el lugar ni el momento indicado - dije intentando hacerla entrar en razón.
- ¡oh! ¿y cuándo mierda sera ah? Tenemos 5 meses de novias y nunca hemos pasado ni a la maldita segunda base - dijo roja de furia.
- te he dicho que aun es muy pronto para hacerlo, además necesito enfocarme en el equipo - dije tranquilamente.
- ¿es acaso qué no soy linda? - me pregunto con lágrimas en los ojos, ¡y ahí esta su chantaje!
- claro que eres linda, te prometo que después del torneo seré toda tuya, pero ahora de verdad necesito enfocarme en el torneo - le dije suplicando.
