5 años después.
Pov Omnisciente.
Una alegre niña bajaba corriendo las escaleras de la gran y acogedora casa, iba precisada porque en unos minutos entraba al kinder y no quería llegar tarde, por suerte para ella el recinto le quedaba tan solo a tres cuadras al norte de su casa.
La niña sin querer tropezó con sus pies y estaba a punto de caer de cara al piso.
- ahhh - grito la pequeña sabiendo que se iba a hacer una pupa, pero como el destino es bueno (cof la escritora cof) su madre llego justo a tiempo para evitar su caída.
- Jesús, Hanna ya te he dicho que no bajes corriendo las escaleras - dijo Camila preocupada, pero la mente inocente de la niña pensó que estaba enojada.
- lo siento mami - dijo bajando su cabeza, a ella no le gustaba que sus madres la regañaran (¿a quien le gusta eso?).
- Hanna, es la última vez que haces eso - Camila dijo desesperada su pequeña no pudo sacarle otra cosa más que su desequilibrio.
- ¿qué pasa aquí? - pregunto Lauren al escuchar los ruidos provenientes de la sala.
- tu hija que casi se cae por las escaleras - dijo Camila bufando.
- oh cariño, ¿estas bien? ¿Te duele algo? - pregunto amablemente Lauren acariciando las mejillas de su preciosa hija ojiverde.
- si mami, estoy bien - dijo sonriendo, Lauren no aguanto la dulzura de su pequeño tesoro y le apretó las mejillas.
- no lo vuelvas a hacer ¿de acuerdo pequeña? - le pregunto Lauren con dulzura.
- esta bien mami, pero ya vámonos que se nos hace tarde - dijo la niña apurada.
- claro que si amor - dijo Lauren tomando la pequeña mochila de "la sirenita".
- perdón mamá - la niña volvió a decirle a Camila.
- esta bien pequeña, solo me preocupo por ti, te amo - le dijo Camila y la beso en la mejilla.
- yo también te amo mami - dijo la niña dándole un beso sonado en la mejilla, luego tomó la mano de su mama Lauren y prácticamente la arrastro fuera de la casa, ni tiempo le dio para despedirse de Camila.
Lauren y Hanna iban caminando tranquilamente por la acerca cuando la niña hablo.
- mami, me gustaría que vivieras con nosotlas, así nos cuidarías más - dijo la niña con pesar.
