ÉL.

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Nunca entendi a los hipocritas que preguntaban "¿A que esperas?".

¿Acaso pensais que yo misma lo sabia?. Debo decir que no. No tenia ni puta idea de por que dejaba pasar oportunidades a pesar del constante "hay trenes que solo pasan una vez en la vida".

Ahi estaba yo en la estacion, solo me faltaban las palomitas mientras veia como las oportunidades llegaban, esperaban un poco y terminaban por largarse.

¿Que me importaba a mi eso? Yo sabia que si lo habia perdido era porque no era mi tren, ni si quiera era el que debia atropellarme.

Intentaba convencer a los demas de que algo llegaria un dia y en ese momento lo sabria, pero por aquel entonces sonaba tan estupido decirle eso a tus amigos adolescentes que acababa desilusionandome.

Paso el tiempo. Mi autoeatima estaba por los suelos y lo unico que conseguia subirla era tener a varios tios con los que tontear. Lo de varios tios se me fue un poco y terminaron siendo cinco y ni aun asi.

Seguia fallando algo. Pero ¿Que mas podia hacer? Nada.

Llego él sin hacer ruido, sin que yo me planteara siquiera estar en sus planes. Tendra novia, pense. ¿Un chico como el con una chica como yo? JÁ. Estaba fuera de mi alcance. Siempre me han gustado los retos pero eso era mas bien tirando a imposible.

Sin embargo poco a poco bueno, que coño, de golpe me demostro lo que queria.

Me salvo.

Y hace casi un año que se la respuesta a la pregunta que tanto tiempo me habia dado por culo, hablando mal y claro.

"¿A que esperas?" Le esperaba a ÉL.

Asi con mayusculas y en negrita porque es algo importante.

Gracias por llegar a mi vida y darle sentido a esas cosas que nunca antes lo habian tenido. S.

Te quiero.

Ponle precio a la lunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora