Ponle precio a la luna

Inmortal.

Busca cualquier resquicio de cordura que pude guardar desesperadamente entre esas hojas medio rotas del libro peor tratado del mundo y con mas miga de la que hay en tu mantel al finalizar la comida del viernes.

Disfuta del humo pasivo que dejo su cigarro mientras cogia su ropa del suelo en un intento mas que fallido por recoger el orgullo que nunca tuvo y deslizar la dignidad por los cristales empañados que,en este preciso momento, recorren las gotas de lluvia de la mañana de domingo mas triste de la historia.

Esa que escribias bajo la luz de la luna a escasos metros de la playa oyendo las olas marcando el ritmo que te hacia falta, porque cuando tenias que guiarte por el de tu corazon a menudo aparecias dormida entre telas con tu boli y abrazando el dichoso libro viejo.

Nunca entendi el funcionamiento de esa cabecita loca encerrada en un constante 'ojala' y guiada por los 'y si' que jamas acaban siendo ciertos.

La tristeza, sensualidad y esperanza plasmadas en tu cuerpo medio desnudo andando de puntillas sobre el parquet donde las tablas crujian y yo pensaba que el viento me jugaba una mala pasada avisandome de que te ibas.

Volvias con algo dulce que muchas veces te hubiera untado por el cuerpo con el unico proposito de comerte cinco veces al dia y gritar alguna de ellas tu nombre mientras una gota de sangre, gracias a mis uñas, deslizaba por tu espalda y acababa entre mis sabanas blancas junto a las palabras que tachaba en los jodidos debates nocturnos cabeza-corazon donde te habria dado mi corazon y me hubiera arrancado la cabeza para dejar de pensar cuantas vidas pasaria en la pequeña casa bajo las mantas desgastadas

Las cuales ahora son mi abrigo y tus labios que son el hilo de cordura que me mide cada dia a besos de pies a cabeza, sin pausas. Matame, vendo mi alma al diablo y nos casamos con la eternidad.

Feliz vida inmortal.