Pánico.

19 0 0
                                    

Han llamado al timbre y he abierto con mi cara de pocos amigos y mis pintas de pocas visitas. Me han dicho que no volverias y todos mis vecinos han oido el  portazo. He llorado como si no hubiera un mañana mientras arrastraba mi cuerpo por las peores calles de este lugar. Me he quitado la chaqueta. He hecho equilibrios y finalmente he conseguido sujetarme en pie. Abajo el rio, arriba el cielo y por delante todo muy negro, tio. Yo he oido todo de fondo, como los coches me pitaban y algun que otro me gritaba "loca". He estirado los brazos como si pudiera volar y he cogido aire con mucha fuerza para saltar. Has tirado de mi camiseta del pijama que tantas veces amanecia en el suelo de tu habitacion y me has gritado. Yo solo he visto el dolor y el panico en tus ojos. Me has cogido de la mano, puesto la chaqueta y nos hemos ido a casa. Al llegar he roto el timbre a martillazos. Ya nadie volvera a echar pimienta donde solo existe azucar y ninguna persona disparará balas contrareembolso.

A.

Ponle precio a la lunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora