BILLY

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No conteste nada y subo las escaleras para ir a mi habitación y cambiarme de ropa, no volvería a bañarme me da pereza.

Ya que dijo que con lo que sea me veo bien, decido ponerme un sweatpants y una remera negra de manga larga que decía fire en amarrillo con candela y unas crocs.

Bajo las escaleras y lo encuentro sentando en el sofá revisando su teléfono, me le quedo viendo un rato y no esta nada mal, lo que me llama más la atención de él son sus dedos, tan blancos y rosados al mismo tiempo y su perfume era tan excitante, uff que rico. Siempre he dicho que si un hombre huele bien suma muchos puntos. 

Nunca lo admitiría en voz alta.

Reaccione que me le quede mirando por mucho tiempo cuando escuche su voz que me trajo de vuelta a la realidad.

– Tómame una foto que dura más.−Dice sin haber levantado la mirada de su teléfono.

– Cállate. –Respondo molesto porque me descubrió espiándolo.

– Si es con tu boca, con mucho gusto. –Dice con una mirada que me transmite muchas cosas que no se describir.

– A donde vamos a ir? –Respondo ignorando su comentario.

– Así que te tomaste en serio lo que te dije de que te veáis bien con todo no? –Dice mientras me observa de arriba para abajo con una sonrisa socarrona−Bueno ya que veo que no te importa vestir lo que sea qué tal si vamos a un restaurante? –Habla con un tono retador.

– Está bien, no me importa.

– Después de ti. –Me dice abriendo la puerta y dándome paso.

Al salir observo una lujosa camioneta negra que es uno de mis autos favoritos es un Range Rover.

– No me digas que este auto es tuyo. –Habloemocionado y sorprendido de que tenga el auto de mis sueños.

– Si lo es, porque lo preguntas?

– Porque este es el auto de mis sueños. –Le digo sin despegar la mirada del auto.

– Bueno pues mal gusto no tienes porque es un excelente auto.

– ¿Me dejas conducirlo? Siiii?–Pregunto emocionado poniendo cara de perrito por si se quiere negar.

– Uhg, esta bien – Camina al lado del piloto con una seña me dice que me acerque y me abre la puerta que caballeroso.

– YEIH!–Exclamo cuando pongo la llave en el switch aprieto el botón de encendido y escucho el motor rugir.

– Oye oye, calmate o te bajo y te pongo de copiloto.– Dice un poco asustado de que este usando su preciado auto – Ademas no vas a dejar energía para mi.

– Aja si, lo que digas.–Respondo restando le importancia.–A donde vamos?

– No te diré a donde pero te voy a indicar el camino.

Me fue indicando el camino poco a poco al final llegamos a un restaurante y bajamos, el valet se lleva el auto para estacionarlo.

Entramos sin siquiera registrarnos, lo que me parece raro.

Al rato llega un mesero y nos da el menú y espera a que ordenemos, pienso que todo en la carta del menú me parece delicioso pero no me puedo concentrar porque siento las miradas de todos a nuestro alrededor viéndome imagino que es por como estoy vestido.

–Que pasa? Te noto nervioso.–Me habla cuando ve que todavía no he ordenado.

–La gente me esta viendo, creo que es por mi ropa.–Respondo.

–Pensé que no te importaba que la gente te viera.–Dice con una sonrisa socarrona.

–Al parecer cambie de opinión, ok?

–Al diablo con esta gente que no te importe lo que digan.–Me aconseja y puedo ver en sus ojos un brillo especial que me transmite confianza.

–Esta bien, lo haré.

Ordeno la comida, pasta con albodigas y pido una botella de vino tinto, eso sorprende al hombre que tengo en frente de mi porque abre un poco sus ojos con sorpresa.

–Así que... vino tinto?

–Bueno si, me encanta el vino, porque no puedo tomarlo acaso?

–Si, aquí no hay padres que prohíban nada.

–Aquí tienen su orden, que lo disfruten.–Llega el mesero con nuestro pedido.

–Gracias Mike–Le dice el.

–¿Conoces al mesero?–Pregunto.

–Bueno si, tengo que conocer a todos aquí, soy el dueño.–Responde tranquilo como si fuera cualquier cosa.

–¡¿QUE TU QUE?!–Grito y todo el mundo si antes tenían sus miradas encima de mí por la ropa ahora es por el grito que acabo de dar.

–Baja la voz–Habla mirándome fijamente con una mirada que me intimida mucho, debe estar molesto por el grito que acabo de dar.

–Lo siento–Digo intimidado por su mirada– Pero como es eso que eres el dueño de este lugar?

–Es la verdad soy el dueño, mi padre lo hizo para mí. –La forma como lo dice es como si lo que está diciendo fuera cualquier cosa.

–¿En serio? ¡Eso es genial!–Hablo emocionado.

–Gracias, ahora podemos seguir con nuestra cita? –Sigue serio, me da un poco de miedo pero se ve muy hot cuando esta así.

–Está bien, comencemos por cuál es tu nombre? –Pregunto.

–Elliot.

–Lindo nombre, no me había dado cuenta que hasta ahora es que escucho tu nombre.

–El tuyo es Zackary. –Habla muy tranquilo masticando su filete.

–Como sabes eso? –Es extraño que sepa esto cuando yo ni se quien rayos es.

–Te conozco de pequeño bebe. – Ahí está otra vez, igual que el tipo de los mensajes, ahora bebe un trago de su copa de vino.

–Que? Yo no te recuerdo. –Digo confundido.

–Lo harás cuando te diga mi nombre completo. –Ahora bebe de su copa de vino.

–What?, tell me who are you. –Cuando estoy nervioso hablo en ingles.

–Before I tell you my name i want to tell you something first–Sacude su cabeza cuando se cuenta de que tambien esta hablando en ingles– porque sé que vas a enloquecer, que me tienes loco y que haría cualquier cosa por ti. –Dice mirándome directamente a los ojos. –Mi nombre real es Billy Elliot Jones.

¿WHAT?

Ahora recuerdo perfectamente quien es, maldito hombre de mierda, tomo la copa de vino que no había probado y la vacío completa en su cabeza y salgo de ese lugar, el valet cuando me ve busca el auto, sé que es de el pero tiene otros para andar, me monto, le doy las gracias y una propina para acelerar lo más rápido que puedo fuera de ese lugar y llegar a donde sea menos a mi casa porque quiero estar solo.