HoSeok es un chico dulce y tierno, pero su obsesión por JungKook lo lleva a cometer demasiadas locuras. Perdiendo así su orgullo e inclusive su amor propio.
Tras aprovecharse del celo de JungKook, una nueva vida llena de despreció y sufrimiento lle...
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—¡No puedo creerlo, Hobi! Debiste decirle que no y mandarlo al carajo, ¡lo hubieras dejado sufrir un poco más!— La voz de JiMin sonaba fuerte, tanto que hacía que HoSeok se avergonzara ya qué estaba seguro que muchas personas lo escucharon.
— No grites, JiMinnie...— dice virando los ojos—. JungKook ha cambiado, me pidió disculpas y fue demasiado dulce...
— ¡Dulce mi trasero!.— Grita JiMin.
— Estoy de acuerdo con eso— TaeHyung llega a la mesa donde los dos omegas conversan y se sienta junto a JiMin.
— Gracias por el dato Tae, pero eso yo no lo quería saber—. HoSeok hace muecas de asco haciendo reír a los presentes.
— Ay, no te hagas el santo, no creo que te quejes cuando JungKook te come el cu-
— ¡CALLATE! No digas nada más, eres un asqueroso, ¡pervertido!.- JiMin y TaeHyung comienzan a reír a carcajadas y en eso llega YoonGi.
— ¿De qué se ríen?.— Se sienta junto a JiMin dejando a este en el medio.
— De nada, Yoonnie.— JiMin da un beso en la mejilla de esté y TaeHyung lo mira indignado.
— ¡A mi no me diste beso cuando llegue!
— También tengo muchos besos para ti— JiMin empieza a dar besos en por toda la cara de TaeHyung y este ríe.
— ¡Eso no se vale! A mi solo me diste uno— HoSeok voltea los ojos al presenciar la escena de la mini pelea que hay por decidir a quien le pertenece JiMin. Se levanta, toma sus cosas y se va sin despedirse, ya que ninguno se da cuenta por estar jaloneando a JiMin de un lado al otro.
Su caminata era tranquila, con una de sus manos acariciaba su vientre y la otra estaba posada en su cintura. A unos cuantos metros logra ver a MinHo, un compañero de una de sus clases.
— Hola, Hobi... ¿Cómo va tu cachorro?—. MinHo le sonríe con dulzura y se toma el atrevimiento de tocar su pancita, a HoSeok no le importa mucho y sonríe.
— Muy bien, este cachorrito crece rápido, gracias por preguntar.
— Te sienta demasiado bien el embarazo, te ves aún más lindo.— La mano de MinHo se dirige a su mejilla pero otra mano interrumpe el tacto con brusquedad.
— ¿No te enseñaron a respetar a un omega que ya tiene alfa?.— MinHo mira con enojo a JungKook y esté planta un sonoro beso en la mejilla de HoSeok.— Este lindo omega que ves aquí, es mío ¡Así que largo!
— ¡JungKook! No trates así a MinHo, él sólo me pregunto como estaba nuestro cachorro— HoSeok pellizca el brazo de JungKook haciendo que suelte un quejido por lo bajo y le pide disculpas a MinHo con la mirada, esté le sonríe y se despide.
— Eres un completo agresivo, te hace daño juntarte con tú amigo ese, JiMin, creo que se llama. ¡Además de que ese te estaba coqueteando!
— Si, se llama JiMin y él no tiene la culpa que seas un imbécil. Y no, no me estaba coqueteando.
— Pues que inocente eres, Hobi...
— Y tú eres un tremendo estúpido.
— Eso dolió, Hobi...
— Te he dicho cosas peores, no te quejes—. HoSeok camina hacia su respectiva clase y JungKook lo sigue por detrás.
— Pero ahora es diferente...
— ¡Es lo mismo!
— ¡QUE ES DIFERENTE!
— ¡NO ME GRITES!
— ¡NO TE ESTOY GRITANDO!
— ¡SI LO HACES!
— ¡QUE NO!
— ¡OJALÁ QUE MI HIJO NO SE PAREZCA A TI!
— ¡SERÍA HERMOSO!
— Ustedes dos, a la dirección ¡Ahora!— El director los mira enojado y HoSeok da un fuerte golpe en la cabeza de JungKook.
— ¿Ves lo que pasa por tu culpa?
— Tú también eres culpable, no te hagas el Santo.
— Sólo callate.— Entran a la oficina del director y toman asiento.
— ¿Se puede saber por que estaban gritando?.— El director mira a ambos con una mirada seria y JungKook aguanta sus ganas de reír por lo patético que se ve.
— Lo que pasa, Señor director, es que esté,— HoSeok señala a JungKook y prosigue— comenzó a gritarme en frente de todos—. El omega se victimiza y JungKook ríe con cinismo.
— Eres un completo mentiroso, Jung HoSeok...
— ¿ Lo ve, Señor director, no se compadece ni por que estoy esperando un cachorro de él...— HoSeok comienza a llorar falsamente pero creíble para el director.
— ¿Cómo es posible, Señor Jeon? Debería cuidar a su omega y no hacerlo sentir mal, como castigo limpiara las canchas.
— Pero...
— ¡Pero nada! Pueden irse.
Los dos salen de la oficina del director y HoSeok se echa a reír.
— Me las pagaras, HoSeok...— JungKook lo mira entre divertido y molesto.
— He escuchado eso tantas veces...
— A ver quien te lleva helado a la cama y te da mimos, estoy molesto, me voy.
— Te encanta darme mimos, y apurate que ya me quiero ir y aún tienes que limpiar las canchas. Iré a comprar helado para verte.
— Jodete...
— Jodeme.
— Con gusto, cuándo lleguemos a casa.
— Lastima, no se puede, mi barriga ya esta grande.
— Pero puedes usar esa linda boquita...
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