Cᴏᴍᴘʀᴏᴍᴇᴛɪᴅᴏs [Cɪᴇʟ ʏ Tᴜ] Pausada //En Edición//

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Ya había pasado más de una semana desde que vivo en la mansión Phantomhive
Casi nunca veo a Ciel por el hecho de que tengo prohibido entrar a su oficina aparte de que suele irse sin decir nada nisiquiera voltea a verme
La mayoría del tiempo me encontraba sola escuchando los desastres que hacían Mery-Rin Finny y Balt y a Sebastián regañandolos por lo que hacen

Sebastián me dijo que hoy Ciel desayunar conmigo
Estoy emocionada ya que Ciel no acostumbra comer conmigo seguido y tal vez así nos podemos conocer un poco más ¿No? Quiero que está "relación" funcione
No amo a Ciel pero tampoco lo odio por lo que me dijo la primera vez que llegue aquí
Y por eso decidí prepararle yo misma el desayuno uno que disguste mucho pero antes de lograr prepararselo debía antes pedirle permiso a Sebastián

— ¡Porfavor Sebastián! Déjame preparar el desayuno ¡No haré ningún desastre! Es una promesa - suplicaba

— Señorita (T/N) ya se lo dije mi amo puede molestarse - Dijo el

— ¡Porfavor!- Suplique una vez más quería darle a Ciel una agradable sorpresa

— Esta bien puede hacerlo- Dijo mientras se retiraba de la cocina cerrando la puerta

Y así empezé a preparar el desayuno, primero comencé preparando unos pancekes con fresas y arándanos con un puré de banana para luego seguir por el te que se que le encantará un te casual como es el te de manzanilla

— ¡Listo! - La sonrisa que formaron mis labios era única ¡Estaba emociona! ¿Le gustara a Ciel?¡Espero que sí!

{.....}

Me senté en la mesa cuidadosamente al frente de Ciel su ojo se dirigió a mí en una mirada rápida y despreocupada pero sin más no le tome importa
Pues sé que se sorprenderá por mi gran desayuno que prepare para mejorar la relación entre el y yo
Ser amigos ¿No es malo cierto?

Mis pensamientos fueron interrumpidos por las campanas que hizo sonar Sebastián para desayunar

— Joven amo la señorita (T/N) a preparado su desayuno con mucho cariño para usted ella dice que quería darle una buena impresión - Formó una sonrisa en sus labios sirviendo el desayuno

Parece que Ciel ignoro sus palabras y con su dedo índice me hizo un ademán (señal)para que me acercara mientras Sebastián servía el te de manzanilla en unas hermosas tazas blancas decoradas con un tono celeste

Cuando Sebastián dejo de servir el te de Ciel me acerqué lentamente a el y me pare frente a este con ya sonrisa y cuando estuve lo suficientemente Ciel me miró con una mueca para después probar el te y apenas lo hizo lo escupió sobre mi

— ¿¡Que asquerosidad es esta!?- El estaba alterado y demasiado enojado que tiro la taza fina haciendo que está se rompiera

— C-ciel yo lo prepare para ti - Dije en un murmullo para que apenas se oyera mi voz

Ciel no dijo ninguna palabra solo se levantó de la mesa y lo seguí hasta mi asiento tomo mi taza de té con la mano izquierda y con su mano libre me dio una dolorosa cachetada que hizo resonar el lugar en un eco
Y yo sin más me quedé petrificada mirando al piso sin soltar ninguna palabra

Pero reaccione al darme cuenta de que Ciel había arrojado el te de manzanilla que le prepare sobre mi haciendo que este cayera sobre mi vestido amarillo blanco. Estaba tal caliente que solté un gemido de dolor por inercia pues me quemaba

— Espero y no vuelvas hacer lo que se te da la gana    
maldita liciada Sebastián cocina y tú me complaceses
¿Entendiste perra? - Seguía petrificada pero esta vez sosteniendo la parte donde había caído el te caliente que era cerca de mi clavícula

Y sin más Ciel salió junto a Sebastian de el comedor dejándome completamente sola adolorida y quemada

Y fue ahí cuando recordé la cachetada que me dio

" Dolió "

Pero más dolía sus palabras

Debía aceptarlo

Soy su perra

Y no puedo cambiarlo aunque quisiera