"El amor es la droga que más cuesta dejar... pero no mata."
Los días pasan, poco a poco se van convirtiendo en semanas y Ricardo no da señales de despertar, eso acrecienta mi angustia, cada mañana le ruego a Dios que me de fuerzas para poder sobrellevar mi situación, son tantas cosa a la vez, la crianza de mis hijos prácticamente sola, Ricardo sin despertar y la evacion a las miles de llamadas y mensajes constantes de Martín, van a terminar por volverme loca.
Con los niños ya en la escuela, me dispongo a arreglarme para ir a la clínica en ese instante suena mi celular de nuevo, es el otra vez, no me deja en paz ni un solo segundo, tal vez le reponderé para darle fin a esta situación de una vez por todas.
-¿Alo, Monica?
Al escucharlo siento que mi corazón se me sale del pecho, es algo incontrolable por mas que quiera no puedo, es una adicción a el al que nunca podre resistirme.
-No cuelgues por favor, escúchame un segundo... porque me evades, sabes que estos días sin ti han sido una tortura... Tenemos que hablar...-Dice con voz cortada y algo melancólico.
Eso me parte el alma, mi ser se divide en dos partes, una con el hombre que una vez ame y que ahora esta al borde de la muerte por mi culpa y la otra parte esta aquí con el hombre que realmente amo y calma mi sed de pasión. No se que hacer ni que decir.
-Martín yo... -No salen de mi boca mas palabras.
-No digas nada de lo cual puedas arrepentirte mas adelante... -Dice muy bajito.
cierro mis ojos y aprieto con fuerza mi celular, no quiero dejar de escucharlo pero a la vez quiero cortar la llamada pero no puedo hacerlo. ¿Porque no puedo hacerlo?
-Sabes que esto es un error y no podemos continuar...
-Shhhh...-Me interrumpe ansioso- No digas nada, necesito verte, tenemos que hablar.
No lo puedo creer otra vez estoy enredada en su voz, he caído de nuevo en sus redes, no puedo contenerme y termino aceptando su propuesta de vernos para aclarar las cosas y hablar con mas calma ya que despues de lo sucedido con Ricardo no e tenido la fortaleza para verlo y decirle que no puedo continuar con esta locura.
Llego a la cafetería que esta a unas cuadras de la clínica donde quedamos en vernos, necesito estar cerca de Ricardo por si se presenta alguna emergencia, ademas cuanto tiempo voy a necesitar para decirle a Martín que lo nuestro termino. Espero que todo salga bien no quiero lastimar a mas nadie y menos a mi misma .
Veo una mesa vacía al fondo y voy a sentarme, decido pedir un café bien cargado ya que necesito la fuerza suficiente para la difícil decisión que voy a tomar, aunque signifique no tocar mas esos labios y esos brazos fuertes que tanto me matan...
Lo veo a lo lejos; tan hermoso como siempre con su camisa a medio abotonar dejando ver su sensual pecho, verlo caminar hacia mi me pone aun mas nerviosa, mis manos comienzan a sudar y se ponen heladas, esa siempre es mi reacción ante el y no quiero que se de cuenta de eso.
-Hola...-Me saluda con un beso en la mejilla, eso me pone mas tensa sin embargo le correspondo el saludo.
-Hola Martín, siéntate por favor.- Mi voz temblorosa me delata.
-¿Que tomas?-Pregunta para aliviar la tensión que se siente en el ambiente.
-Café...-Le digo tratando de no mirarlo mucho a los ojos.
-También necesito uno.-Le hace señas al mesero y le pide un café bien cargado sin azúcar- Lo siento mucho, siento lo que le sucedió a tu esposo ...
ESTÁS LEYENDO
Atrévete a Ser Mi Amante
RomanceMonica típica esposa y madre, dedicada a su familia, todo marcha maravillosamente... Tiene todo lo que toda mujer desea, un trabajo estable, unos hijos maravillosos, y el esposo perfecto.. Todo macha a las mil maravillas hasta que su mundo da un gir...