Seis meses atras.
Todo es perfecto…
¿Qué puedo pedir?
Nada. No hay nada más que pueda pedir. Estar con el amor de mi vida es lo mejor…
Lo único que necesito, mi cama, mi amada y adorada cama, ¿qué más podría desear? todo es perfecto, hasta que escucho un sonido, el más horrible que he escuchado en toda mi vida; por favor que alguien lo calle.Pi… pi… pi…
No quiero abrir mis ojos sería un crimen contra la comodidad.
¡Ya! cállate criatura maligna pariente de mi hermana.
No quiero levantarme. Mi cama es tan suave, casi puedo escucharla pedirme que me quede a su lado. Pero, siento que olvido algo ¿Qué será? no me acuerdo, ni quiero, creo que comenzaba con E.¿Eco?
¿Exorcismo? Espero que no.
¿Electroencefalografía? ni si quiera sé que rayos es eso.
¿Estofado? ya quisiera.
E…E…E…E…E…E…
¿Qué será?
¿Entrevista?
¡Entrevista! No. lo olvide, auxilio, debo salir de aquí, no puedo moverme, estoy enredada en las sabanas ¿Cómo rayos puede enredarse uno en esto? todo el caos causa una pelea entre las sabanas y yo. Una pelea a muerte, la cual perdí, tristemente me caí.
― ¡auch! ― grito ― eso dolió ― caer de la cama no es lo peor, lo peor es que alguien pueda escucharme.
― Oye Abi ¿con quién te estas matando? ― Mi querida y dulce hermana “siempre preocupándose por mi” ― creí que hoy era la entrevista.
― Claro que es hoy ― corro al baño, tengo que apresurarme, tomo una ducha que no es para nada calientita, cepillo mis dientes súper rápido, lo malo sucede cuando peino mi cabello esta súper enredado y eso que es liso.
― deberías poner el despertador cuatro horas antes. Digo, una hora para despertar, otra para renegar, luego abrir los ojos y por ultimo arrastrarte por la cama para levantarte.
― Ja, ja, ja… que graciosa― gruñó. Camila seguía en mi cuarto ¿acaso no tiene nada que hacer? si tiene, ver al desastre andante corriendo por toda la habitación, mi vestuario no es el mejor, solo consiste en una falda negra de tubo, una blusa manga larga color crema, un chaleco que hacia juego con la falda y unos zapatos de tacón plano, no soy perfecta, voy a buscar trabajo, no a ver a la reina de Inglaterra.
― Espero que por fin consigas trabajo ya tienes 26 años. ― ¿tenía que recordármelo?
― Debo correr ― tomo mi cartera, junto a mi hoja de vida, e intento salir pero ella me detiene.
― ¿No te maquillaras?
― Por supuesto que no― niegó ― el maquillaje es malo para la piel ― que mentirosa, la única razón es que me da pereza arreglarme.
Bajo por las escaleras a toda prisa, mi madre sale de la cocina, en su manos una bandeja repleta de comida que llevaba hacia el comedor.
― Cariño aun estas aquí, creí que ya te habías ido. ― entrecierro mis ojos.Si, ya me fui este es un holograma.
― No, me quede dormida, adiós mami ― salgo antes de tener que escucharla hablar acerca de la responsabilidad, puntualidad, laboriosidad, ok, entiendo, soy pésima en esos puntos. La entrevista inicia a las 8:00 y son la 7:40 tomar un taxi o el metro no son las opciones correctas, salir a la calle de Cuauhtémoc, México es un caos total a esta hora.
La única solución: correr o usar la teletransportación de goku, lo cual no tengo.
Las bocinas de los autos y gente gritando es el pan de cada día, bola de amargados caminen, es bueno para la salud.
Después de toda la travesía en la que casi me caigo como 6 veces por culpa de los estúpidos zapatos, ¿a quién se le ocurrió crear zapatos así? seguramente alguien que deseaba ver sufrir a las mujeres. A excepción de una que fue provocada por una señora que no se quitaba de enfrente y que luego me voy pasando de edificio pero me regreso, por fin entro, ahogándome, pero entro, escucho los aplausos y felicitaciones debido a mi hazaña, claro en mis sueños.
― Hm… buenos… Días… vengo por la entrevista de trabajo. ― quizá tengo un bicho raro en la cara porque la recepcionista me ve con cara de “y tú que criatura eres” acaso nunca ha visto a una mujer cansada de tanto correr.
― ¿Tu? ― levanta sus cejas despectivamente, ― lo siento pero el número de entrevistados está completo, intenta llegar temprano la próxima vez, si es que la tienes, claro ― se mofo.
― ¿Perdón? ―digo entre dientes ― pero tengo derecho a estar aquí tanto como ellos ― señalo al grupo de personas sentadas en unas sillas a la derecha. ― Además, como esta tan segura que alguno de ellos quedara en el puesto ― todos posaron sus miradas en mí, y si las miradas mataran… ― No digo que no sean buenos profesionales, solo digo que una persona mas no es problema ¿verdad?
― Lo siento, pero si el número de personas está completo, no puede hacerse nada. Políticas de la empresa.
― ¿segura? solo quiero una oportunidad ― suplico,incluso puedo ponerme de rodillas si ella quiere.
― Las oportunidades se dan, si no llegas a tiempo se pierden.
― Pero…― me interrumpe.
― Debes irte ― frunce el ceño ― si no lo haces llamare a seguridad.
¿Qué?
No tenía otra opción tuve que salir antes de que me sacaran a patadas de allí. Quiero llorar, suspiro decepcionada de mi misma, no puedo lograr algo pormi misma, tal vez todos tienen razon, soy un desastre
¿Por qué tengo tan mala suerte?
camino sin mirar hacia donde voy, me siento una fracasada, se lo que dira mi padre:
“Nunca encontraras trabajo, ríndete y busca un marido.”
Agh…
Ojala fuera millonaria, aria lo que quisiera y nadie mediría nada.
Ciento que algo cae por mi mejilla, me toco ¿agua? de pronto empiesa a llover, y no es una llovizna, el agua me cae a cantaradas. Lo que me faltaba… ni siquiera traía un paraguas.
― en serio mundo ¿Por qué me odias, que te hice para merecer esto? Ni siquiera es invierno, agh... ― reniego y pataleo sin importarme quien me vea. En definitiva, no es el mejor día de mi vida.
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Ninguna como yo
RomanceAbigail, una mujer perfectamente imperfecta. No necesita a un hombre, pero el mundo tiene otros planes en mente; por suerte, ella tiene metodos "muy" efectivos para evitarlo. Registrada en Safe creative, código:1911202520731 La imagen no me pertenec...