El resto del último trimestre transcurrió bajo un sol radiante y abrasador. Hogwarts había vuelto a la normalidad, con sólo unas pequeñas diferencias: las clases de Defensa Contra las Artes Oscuras se habían suspendido y Lucius Malfoy había sido expulsado del consejo escolar. A Paige al principio aquello le había descolocado pero en cuanto Harry le contó que él había liberado a su elfo doméstico Dobby al tenderle una trampa con el diario y un calcetín, pero aparte de eso descubrió que fue el señor Malfoy quien puso el diario de Tom en manos de Paige en Flourish y Blotts, llevaba a que probablemente había sido él quien le había dado el diario también a Paige durante las vacaciones de verano pasadas.
Todo encajaba pero no podría asegurarlo puesto que no recodaba nada similar. Draco ya no se pavoneaba por el colegio como si fuera el dueño. Por el contrario, parecía resentido y enfurruñado y eso solo servía para que Paige lo chinchara más que nunca.Para la Slytherin todo iba con una normalidad relativa puesto que tener que lidiar con su verdadero origen comenzaba a generarle problemas para dormir y no le ayudaba mucho romperse la cabeza buscando contarle a sus amigos lo que pasó saltándose los detalles importantes pero, por suerte, su gato había decidido darle tregua ya que no había ningún diario controlándola y la acompañó las últimas noches en el colegio en la cama ronroneando contra su estómago.
Pronto los baúles volvieron a estar llenos y en lo que se acercaba la fecha de partida todos aprovecharon de desquitarse con la varita haciendo magia en la sala común lo más que podían. Malfoy y Paige se batieron a duelos imaginarios varias veces empezando un mini campeonato entre los de cursos inferiores hasta que tuvieron que dejarlo el último día cuando dejaron a una niña de primer año con varias manchas azules en la piel. Obviamente ninguno quiso responder por ello.
Mientras Paige ya salía rumbo a la estación de Hogsmeade apenas prestando atención a la conversación de Daphne y Joy que seguían sin creer todavía lo de Lockhart, sosteniendo la canasta de Morpheus, pudo divisar una frondosa cabellera negra cuya mano iba entrelazada con la de una rubia. Se acercó puesto que tenía algunas cosas que aclarar con Khristeen.
—Oye, Lestrange —llamó, a lo que ella se detuvo mirándola inexpresiva—. Tú... ¿escribiste mi nombre en la hoja que arrancó Granger?
La pelinegra solo se encogió de hombros como restándole importancia—. Quizás... alguien habría tenido que hacerlo.
—Pero espera un segundo ¿cómo haces esas cosas?
—¿Qué?
—Nunca me dijiste cómo podías hacer para saber lo que pasaría en un futuro próximo—explicó Paige algo exasperada—. Es como si lo supieras todo.
Khristeen solo sonrió de forma misteriosa mientras a su lado Tessandra solo veía la escena sin inmutarse, como que ya estaba acostumbrada a la forma de ser de la de rizados cabellos.
—Es algo fascinante ¿no crees? —dijo por toda respuesta mientras comenzaba a alejarse—. Vamos, Sandra.
Aprovechando un grupo grande de estudiantes, Khristeen se alejó junto a su amiga dejando a Paige prácticamente con la palabra en la boca.
—Eres una vidente ¿no es así?
Ella no lo afirmó...pero tampoco lo negó. A pesar de haberla ayudado tanto a lo largo del curso seguía sin comprender la forma de ser de la pelinegra y temía que quizás nunca la entendería. Resignándose, Paige solo volvió con su grupo para subir al tren.
Cada vagón se llenó rápidamente pues muchos estaban ansiosos de volver a su casas a relatar cómo había ocurrido todo en Hogwarts con respecto a los ataques. Paige, como siempre, eligió uno de los vagones finales donde irrefutablemente la acompañaron Daphne, Joy, Theo, Zabini y Draco junto a sus inseparables guardaespaldas Crabbe y Goyle.
ESTÁS LEYENDO
Paige y la Cámara de los Secretos | Harry Potter |
Aléatoire❝ -Me preocupa descubrir un día algo que hubiese preferido no saber. -¿Preferirías haber vivido toda una mentira o tener la certeza de que no todo era verdad? -No sé. ❞ / Fanfic basado en la exitosa saga de J. K Rowling, la mayoría de los persona...