Lindas mascotas

🦊Capitulo 4 🐾

Conner llevaba en sus brazos a Tim al estilo princesa, las orejitas de zorrito estaba agachadas, y no podía evitar olfatear debido a sus nuevos sentidos, muchos aromas invadían su nariz y le llamaban la atención, sostenía aún el frasco con un poco de la sustancia que habían ingerido para poder analizarla después.

A Conner le parecía muy tierno verlo así le hacía sentir extraño al tenerlo tan cerca, era extraño para el ya que la unica vez que sintió algo así fue con su ex-novia Megan, pero no puede ser amor lo que siente por su amigo o ¿si?

Al llegar a la casa de la sr Martha Kent lo primero que hizo Conner fue depositar suavemente a Tim en el sillón.

-¿Se te ofrece algo?- Pregunto mirando como la ojeras de Tim se movían al percibir su voz.

-No gracias estoy bien ademas no quiero abusar de ti- Dijo sonriendo timidamente.

-No te preocupes para eso estan los... amigos- Contesto lo último algo bajo y sin saber porque algo triste.

-Bueno...¿Me gustaría saber si me podrias prestar algo de ropa?- Pregunto sonriendo un poco apenado.

-Por supuesto enseguida vuelvo- Respondió, para posteriormente subir a su habitación por ropa, para su pequeño y delicado amigo.

Cuando bajo traía en sus manos una playera negra con en logo de superman y un pantalon algo pequeño para el.

-Es lo mas pequeño que tengo espero y te quede- Dijo, entregandole la ropa al actual Red Robin.

-Gracias...Oh ¿Te podría pedir algo más?- Pregunto Tim haciendo carita de cachorrito abandonado, bajando sus orejitas de zorrito

-Seguro pide lo que quieras- Sonríe amablemente el kriptoniano.

-Podria usar el baño-

-Claro estas en tu casa puedes ir a donde quieras-

-Gracias, nuevamente...bueno si me disculpas voy a bañarme- Dijo para después meterse al cuarto de baño, con la ropa que le había traído su amigo.

Tras un rato de esperar Conner por fin escucho la voz de Tim diciéndole que había tetminado y que le agradecía nuevamente por dejarle usar el baño, menuda fue la sorpresa al verlo.

Al mirarlo se quedo sin habla ya que solo portaba su playera, su cola y orejas estaban agachadas y tenia un pequeño sonrojo.

-Este yo-yo solo me puse la playera por-porque el short en efecto no me quedo- Exolico algo avergonzado avergonzado y nervioso.

-No te preocupes te queda bien- Le responde con una pequeña sonrisa nerviosa ~Condenadamente sexy y bien- Piensa mientras lo miraba de arriba hacía abajo embobado en su pequeño y fragil cuerpo, mientras su rostro se coloreaba un poco.

-Conner si no fuera mucho pedir y si tú quieres...¿Podria-mos dor-mir juntos como a-antes?- Pregunto sonrojado y nervioso y ante tal pregunta Kon se sonrojo, aún más.

-¿Pero Tim no prefieres comer algo antes?- Respondió con otra pregunta.

-No gracias...Si no quieres esta bien- Responde algo triste, bajando sus orejas y metiendo su colita entre las piernas.

-Por supuesto que quiero es solo que no has comido nada- Dijo suavemente y sonriendole para animarlo ~Por supuesto que quiero lo que no quiero es terminar haciendote algo indebido y que me odies por eso~ Pensó conner.

-¡Esta bien!- Hablo sonriente y emocionado Timmy.

Tras esa pequeña platica se fueron a comer algo ligero, y se pusieron a hablar sobre diversa cosas al terminar lavaron los platos y fueron al cuarto del clon de superman para dormir.

Al estar en el cuarto de Conner los 2 se acostaron en la cama dandose la espalda Tim con su colita entre sus piertas y haciendose bolita ya que sentía frío y temblaba de vez en cuando.

Al percatarse de esto Kon se voltea y abraza a Tim por la cintura pegandolo mucho a el, lo que hace que Tim despierte y se intente liberar de su agarre por instinto.

-Tranquilo zorrito soy yo, tenías frío por eso te abrace- Susurro Conner en su oreja haciendo que Tim se relajara y pudiera mover su cola y sus orejas,  grave error, no por el si no por Conner, que cada movimiento de la cola de Tim hacía, rozaba su miembro.

~Controlate Conner es tu amigo no le hagas nada y menos ahora~

Tras unos minutos Kon porfin consiguio dormir al lado de su pequeño zorrito, abrazandolo y sin darse cuenta, entrelazando sus manos.