Capitulo 4: batalla entre dioses.

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Estábamos llegando a Roma, viendo el reflejo del retrovisor, los tres héroes estaban cambiando sus expresiones. Se veían mucho mas serios, hasta se veía que estaban hablando.

Nos estábamos preparando para entrar en un campo de batalla del cual no podríamos salir.

Cuando llegamos a Roma, Júpiter se da cuenta que el anticristo se encontraba en el coliseo. Guiados por sus sentidos ellos van muy rápidamente hasta allá. Nosotros no podíamos alcanzarlos. Al instante llegaron al coliseo.

Júpiter deshace aquel carruaje y comienzan a caminar para enfrentarse a su enemigo encarnado. Minerva, extiende su mano y en breve comenzó a emitir unas raíces, que luego tomaron forma y de un destello se transforma en una espada. Juno con su búho rodeándola, comienza a iluminarse y aquella ave se transforma en su lanza y escudo.

Cuando entraron al coliseo, lo vieron, estaba a lo lejos en la base del coliseo, sentado en una especie de trono hecho con oscuridad. Los observaba de lejos sonriente.

Júpiter:- Desertor, responde a mi pregunta, ¿Cuál es tu objetivo a seguir?

Su mirada se desvía solo en Júpiter, sus ojos intimidantes, llenos de maldad, acompañados de una voz escalofriante, responde.

666:- Plebeyo, aquel que ose enfrentarse a mi, sufrirá mi ira. Pues yo traeré el infierno a tierra para aumentar mi poder y superar a cualquier Dios supremo.

Júpiter estaba perplejo, con su antiguo grupo lograron destruir su sello, estar en tierra debería haberle costado mucha energía y debería carecer de poder, pero aquel demonio, gozaba de poder y orgullo.

666:- Para aparecer en tierra tuve que usar mucho poder, lo cual cuando llegue no podía controlarlo, genere temblores que mato a muchas personas pero eso me dio cierta cantidad de poder.

Nosotros llegamos luego de que tengan esta plática, comenzamos a correr al coliseo. En el cielo comenzó a aparecer una tormenta eléctrica. Yo tenía un mal presentimiento.

Cuando entramos y los observamos yo vi al Anticristo. Comencé a tener dolor de cabeza y miedo al verlo. Su presencia misma era agobiante.

Juno, desde su gran distancia, posiciona su lanza  tomando como objetivo al monstruo, emprende su ataque lanzando aquella arma a una gran velocidad, una luz fuerte comenzó a aparecer e iba destruyendo las estructuras que la rodeaban. Al mismo tiempo Minerva, con un grito de furia se lanza con su espada a atacar al Anticristo.

El maldito detuvo aquella lanza con un brazo, y con el otro detuvo el ataque de Minerva, agarrando su espada con mucha facilidad. El demonio hizo una mínima fuerza con sus dedos, rompiendo la espada como si fuera de vidrio y con la misma mano, el se extendió para estrangular a Minerva.

La lanza estaba cargada con energía de ataque, ósea que hasta que no atraviese a su objetivo no se detendría. El demonio con una simple maldición altero el objetivo e inserto la lanza en el estomago de Minerva. Una onda expansiva la impulso a su izquierda, dejándola en el suelo.

Juno, enojada, salta a acudir a Minerva con su gran escudo y habilidad de combate. En ese breve instante Júpiter recita lo siguiente para invocar a su arco.

Júpiter:- Deorum mea patria stella. Astral me adducere adoraveris coram me.

Los rayos comenzaron a caer del cielo, rodeando a Júpiter y creando su arco con rayos.

El Anticristo se molesto, el se levanta de su trono y salta a atacar a Júpiter. Cuando Juno se acerca, el maldito le tira una maldición que la lanza a lo largo del coliseo, golpeándola con las estructuras y destruyendo todo.

Júpiter lanza una flecha eléctrica pero el Anticristo desaparece. En un simple parpadeo se sitúa frente a Júpiter y con una sonrisa le dice.

666:- Tu fuiste el maldito que impidió que yo llegase a tierra hace siglos. Eres el único cabo suelto que me queda.

Júpiter estaba frustrado, el con furia invoca una lluvia de flechas eléctricas, pero ninguna surte efecto. El Anticristo era demasiado fuerte. Con una barrera de oscuridad evito cada flechazo, y en su consecuencia invoca una especie de espada de oscuridad y esta atraviesa a Júpiter.

Minerva desde lo lejos gritaba, nosotros estábamos en Shock, no podíamos siquiera parpadear. En cuestión de segundos, el demonio acabo con los tres dioses.

666:- Juro por tu nombre, que destruiré la puerta espiritual, al ángel de la guarda y con el a todos los dioses que te veneren. En nombre de Titán, quien tú corrompiste, destruiré todo lo que amas. Y tú me ayudaras.

Al instante Júpiter muere. El dios supremo, más poderoso, murió a manos de aquel monstruo. Nuestra esperanza se vio opacada. Yo fui el único que pudo ir corriendo tras Minerva para acudirla. El Anticristo desapareció al momento y de lejos se veía como el cuerpo de Júpiter se hacia un polvo cristalino que subía al cielo.

Cuando llegue, la lanza de Juno había desaparecido. Comencé a hacer presión sobre su herida y le pregunte que podría hacer. Me encontraba desesperado, la chispa de fe que tenía no quería que se pierda. Minerva con mucho esfuerzo comenzó a decirme que hacer.

Minerva:- Ahora que mi padre no esta, y que mi madre esta inconsciente, solo me queda una alternativa. Pronuncia las palabras exactas que usaste para traernos en tierra, pero en vez de decir nuestros nombres y "Triada Capitolina", tienes que decir...

Comencé a elaborar nuevamente el círculo de sal con la estrella de David, con la poca sal que había guardado en mi bolsillo. El cielo se había despejado, la luna empezaba a iluminar todo, en lo cual yo comienzo a recitar las palabras que habían quedado grabadas. Esta vez con la esperanza de que se pueda triunfar después de este desastre.

Adriano:- Fuerzas Astrales, los llamo a ustedes. Descendiendo desde sus estrellas natales, invoco sus fuerzas para afrontar y proteger la paz brindada. Aquí invocando a sus nombres, Tinia, Uni y Minerva, los solicito en tierra, para servir al cielo, llamando aquí a la Triada Etrusca.

El círculo comenzó a iluminarse, el viento nos rodeaba.

¿La esperanza por fin se encontraba ante nosotros?

¿Podrán vencer a aquel demonio que derroto a la Deidad más poderosa?


Proximo Capitulo: Una nueva esperanza.

La Tríada de HéroesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora