" Zeldris Wood "

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Los días de una vida de matrimonio pasaban sin mucha novedad entre Meliodas y Elizabeth.

Su compañero y mano derecha del restaurante, Ban, había salido de viaje de bodas con Elaine, y Meliodas tenía que estar a cargo del restaurante la mayor parte del día.

Cierto día en particular tenía muchos comensales en su negocio y estaba algo atareado con muchas cosas que hacer.
Iba de la cocina al gran comedor.

Entraba a la cocina de nuevo cuando una pareja entró al lugar.

-Es lindo, ¿Tendrán alguna mesa disponible?-

Preguntaba la chica de cabellos rubios trenzados de lado derecho, de ojos color miel, grandes pechos y cintura pequeña. Vestía pantalón de mezclilla, una blusa rosada, y zapatillas bajas color rosa.

Estaba de pie en la entrada mirando su alrededor buscando alguna mesa disponible, a su lado de la mano estaba un joven de cabellos negros peinados hacia atras, ojos esmeralda y de estatura un poco baja a comparación de la chica. Vestía pantalón de mezclilla y una camisa de lino roja y zapatos negros.

Se notaba más serio que la chica a su lado con un semblante pacífico pero sin sonrisa en su rostro.

Una mesera los miro de pie y se acercó rápido a ellos

-¡Hola buenas tardes! ¿En qué puedo ayudarles?-

Pregunto amablemente la chica de cabellos negros bien peinados amarrados en una coleta.

-¿Tendrá alguna mesa disponible?-
Pregunto amablemente la chica rubia.

-Por supuesto, me parece que hay una disponible cerca de la ventana, siganme por favor.-

La pareja aún de la mano siguieron a la mesera.

Les mostro su mesa y el chico de cabellos negros muy Caballeroso movió la silla para que la rubia pueda sentarse.

Ella se sentó y le agradeció.

La mesera le dio el menú y los dejo a solas en lo que decidían que ordenar para comer.

La rubia ya había decidido que comería mientras su acompañante aún leía el menú. Ella miraba a su alrededor observando cada detalle de aquel lugar.

Su mirada llegó a la entrada donde una rubia de ojos azules entraba y saludaba a todos.

Se levantó de inmediato al ver entrar a la ojiazul.
No dudo en llamarla por su nombre mientras se acercaba rápido a ella.

-¡¿Elizabeth?! ¿Eres tú? ¿Elizabeth Liones?-

Aquella ojiazul miro a su derecha, encontrándose con la chica que le hablaba.

-¿Gelda? ¿Gelda Valerious?-

Ambas rubias se abrazaron emocionadas.

Gelda y Elizabeth se habían conocido en un curso que Gelda había dado hace 3 años atrás

-¡No te veía desde aquel curso!-

Comentó Elizabeth mientras se deshacía de aquel abrazo.

-¡Si! ¡Pasaron tantas cosas! Perdí mi teléfono y no sabía cómo localizarte, pasaba por aquí hace 6 meses y fui al hospital y pregunte por ti y me comentaron que te habías ido a Miami.-

-Si, fue por un asunto personal. Pero que bueno verte Gelda. ¿Veniste sola?-

-¡Oh no! ¡Lo lamento! Me olvidé de mi novio. Ven te lo presentaré.-

Mientras ambas rubias caminaban hacia la mesa Elizabeth se fue dando cuenta de que aquel pelinegro era bastante parecido a Meliodas.

Gelda los presentó y ambos se saludaron.

* DOBLE VIDA *Donde viven las historias. Descúbrelo ahora