CONTROL ABSOLUTO

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De momento, a mi novia no le podría ningún microchip, siempre y cuando no me tocara las narices, pero como es normal los primeros años fueron de maravilla, éramos como dos adolescentes.
Fue pasando el tiempo y al final decidimos irnos a vivir juntos, busquemos un piso barato y para que no me pillara hacienda no lo pague al contado sino que nos abrimos una hipoteca y la pusimos al nombre de los dos.
Fueron unos años felices hasta que salió el tema de los críos, yo no quería tener ningún niño porque ya tenía bastante con lo mío, pero ella insistía en que sí, entonces no tuve más remedio que meterle un microchip para tener el control absoluto de ella y así se olvidaría del tema.
Ya con mi novia dominada si que era el rey del mambo, no hacía nada de faena en casa, como cuando estaba en casa de mis padres, pero con la diferencia de que esta vez entre la tienda y los chanchullos no paraba en casa, solo para comer y dormir, y habían veces que ni comer porque ya comía en el bar.
Si no fuera porque está dominada ya me hubiera dejado muchísimo antes, pero bueno que tenía carta blanca para ser libre para hacer mis cosas.
Con una hacker en casa le dije que me hiciera una aplicación  para controlar el ordenador desde el mismo móvil, así me sería más fácil controlarlos a todos.
Cuando lo tuve instalado lo probé y funcionaba de maravilla, me iba de coña tener todas las funciones en el teléfono sin necesidad de estar en casa, ya que lo podía hacer desde donde yo quisiera.
Entonces me puse a pensar en todas las cosas que podría hacer a distancia,  era un chollo lo que me había buscado, pero pensando y pensando llegué a la conclusión de que ya me estaba hartando de las arañas mecánicas y tendría que hacer otros insectos para llegar a más gente y más lugares aunque estuvieran lejos, así que me puse a hacer abejas, escorpiones y otros insectos pequeños para que no lo viera nadie cuando les inyectara el microchip, vaya que tenía una flota de insectos bastante bestia ya, solo faltaba ponerlos en marcha pero tenía que ir pensando a quien se los pondría.

DOMINACION MENTALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora