Proyecto Familia [NamJin]

Cap 16

—Señores Kim, que gusto me da que vengan a ver a Tae, no ha parado de preguntar por ustedes— Ya habian pasado dos semanas desde el incidente con Taehyung, se habian ido por una semana de luna de miel en cuanto Tae se recuperó, todo, o al menos casi todo habia vuelto a la normalidad, excepto por el dolor en el pecho que Jin y Namjoon habian sentido cuando Taehyung le contó que unos señores Japoneses habian llegado a visitarlo. Lo estaban perdiendo, lo sabían, pero no eran capaces de enfrentar esa realidad, habian prometido luchar por él. Y lo harían.

—Hola señorita Lina, en realidad... Nosotros.. Veníamos a verla a usted — con nerviosismo SeokJin tomó la mano de Namjoon y apretó suavemente.

—A mi? Bueno.. En ese caso pasemos a mi oficina. — La pereja caminó a paso firme, sabian lo que tenian que hacer, sabian sus posibilidades pero aun así lo intentarían. —Ahora, díganme en que puedo ayudarles.

—Nosotros.. Queremos adoptar a Taehyung — Namjoon levantó su mirada observando la cara nada sorprendida de la directora. —Queremos a Taehyung, como nuestro hijo, y déjeme decirle que no vamos a permitir que otra familia se lo lleve, no.. No vamos a desistir. Seremos nosotros quien lo adopte. Es nuestro hijo. — La señorita Lina estaba sentada en su silla de escritorio con algunos papeles en su mano, ni siquiera los estaba observando.

—Nos está escuchando? —Preguntó Jin, le pareció que a la directora ni siquiera le estaba importando lo que estaba diciendo.

—Mm.. Pues si los escucho. —Levantó la mirada y luego la volvió a poner en los documentos que sostenía. —Me temo que eso ya no es posible.

—Que dice? Tae.. Taehyung es nuestro hijo. —Dijo Namjoon firmemente, volteó q ver a Jin quien tapó su boca sorprendida con su mano derecha.

—Se tardaron mucho, si hubieran venido unas semanas antes hubiera podido ayudarlos. — Lina seguía mirando lo papeles y de vez en cuando firmaba algunos, no parecía muy interesada en los dos hombres que estaban frente suyo.

—Nosotros haremos lo que sea, por favor, no nos separen de él, Kookie lo quiere mucho, lo extraña, por favor. — SeokJin rompió en llanto refugiándose luego en el pecho de su esposo, en ese momento Namjoon miró a la señorita Lina y esta los estaba mirando mientras se quitaba los lentes de su rostro.

—Oh.. Yo.. Que hago. Lo siento— exclamó un poco asustada, Namjoon no entendió el repentino interes que en ella surgió por la condicion de su esposo, ahora parecía abatida y un tanto avergonzada. — No señor, no llore, mire aqui tiene mi pañuelo— Extendió el pañuelo blanco para que lo tomara pero SeokJin no dejaba su escondite ni tampoco dejaba de llorar, había perdido a su hijo y eso nunca lo iba a superar. — Señores Kim, lo siento mucho, no esperaba llegar a este punto.

—De que habla? —Pregunto Namjoon muy confundido.

—Yo.. No es cierto.. Era solo un castigo, una mentirita para castigarlos, esque... Se tardaron tanto en darse cuenta que querian adoptar al chico que me estaba comenzando a enfandar. —Comentó con los brazos cruzados creando una voz demasiado dramatica para el gusto de Namjoon.

—A ver si se explica, porque no estoy entendiendo nada. — Namjoon apretó el hombro de su esposo para que tratara de calmarse los llantos no lo dejaban concentrarse del todo en lo que sea que la señorita Lina estaba hablando.

—Los japoneses no se van a llevar a Taehyung. —Solto sin más, generando un gran silencio en la habitación, haciendo que porfin SeokJin dejara de llorar y volteara a verla con los ojos rojos e inchados.

—Que!?  — Respondió la pareja en unísono creando eco en el oido de la directora.

—Que, Taehyung está libre— Levantó las manos tratando de crear un ambiente de alegria pero volviendo a ponerse seria en cuanto vió la mirada asesina de ambos hombres. — Es decir, aun hay algunos interesados en Taehyung— Volvio a sentarse en su silla y a revisar los documentos que antes estuvo firmando. — Pero.. La familia japonesa perdió recientemente sus acciones en la empresa de la que eran casi dueños, osea.. Se quedaron sin nada, por lo que se decidió que ya no eran aptos para mantener al niño.