Parte 5

3.3K 287 19
                                    

Mikey estaba "normal" para todos y para él mismo, todo parecía normal, no sentirá nada, actuaba como siempre, era como si nada hubiera pasado. Solo en algunas ocasiones por la mente de Mikey pasaban pequeños recuerdos, pero no pensaba más en ellos, trataba de no prestarles atención, así pasarían algunas semanas.

Los problemas con Raph iban en aumento, parecía más inestable cada día, y esa era la razón del porque siempre surgirían esos recuerdos en Mikey, ¿Cómo olvidar algo que estás viviendo?

Acababan de terminar el entrenamiento, Mikey preparaba la cena, pero  escuchaba desde la cocina la pelea entre sus hermanos, esa noche Raph no cenó con ellos, diciendo que estaba cansado e iría a dormir. Durante la cena, Mikey era conciente que su familia no sabía que hacer con Raph, es que no lo entendían, les eran difícil para ellos comprenderlo. Y de alguna manera rápida o lenta terminaron de cenar, ¿Cómo saber cuánto tiempo había pasado si todos estaban en sus pensamientos? Y así todos se fueron a sus respectivas habitaciones.

Mikey entró a su habitación, se sentó en su cama, su mirada no mostraba expresión alguna, suspiró.
Lo había decidido, pensaría lo que había pasado. Cerró los ojos y comenzó a recordar.

•A Raphael llorando
•-Siento que estoy bajo su sombra-
•-Lo quiero más a él-

Y trató de seguir recordando todo, todo lo que había pasado.

Cuando hubo terminado se extrañó, frunció el ceño, trató de respirar suavemente, y trató de volver a recordar.....pero no.
Mikey comenzó a extrañarse, él había querido no pensar, porque si sabía que pensaba, que si recordaba las cosas, le iba a doler, sabía que aunque no quisiera le sería doloroso.... entonces ahora que se había dado el tiempo de pensarlo, y recordar
¿Porque no dolía?...¿Porque lo sentía nada?.
Mikey no se alarmó ni nada, solo se extrañó, colocó una mano sobre su mentón ¿Había guardado también las cosas que no sentía nada de lo que paso?

Pensaba que necesitaba pensar, llorar y desahogarse y por eso se atrevió a pensar, todo era ideal, no había nadie, tenía tiempo, estaba solo y nadie lo escucharía. Pero no, simplemente no tenía el sentimiento, ni las ganas de llorar. Tal vez debió de hacerlo en el momento que paso, en que deseaba y necesitaba llorar.

HermanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora