Capitulo 17: Enemigos

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-¿Entonces lo sabe? –David fruncio el ceño mientras daba vueltas con el sillon -¿Lo sabia cuando estabas alli?

-No lo se –Jack le miro molesto -¡¿Quieres estarte quieto?!

-Es que estoy nervioso –David rasco su cabeza –Esto es emocionante, como una de esas telenovelas que ve  A Ana le fascino la historia.

-¡¿Qué se lo has contado a tu novia?! –Jack abrio los ojos de golpe

-Prometida –el rodo los ojos – Es mi prometida

-¡Muy bien! ¡¿Y por que no lo publicas en el periodico?! –Jack se levanto de su asiento y camino nervioso por el despacho

-Seria interesante ver la reaccion de Casandra –David aguanto la risa al ver la mirada envenenada de su amigo –Oh vamos, solo era una broma –suspiro –Sabes que Ana no dira nada –Fruncio el ceño – Lo que si. Esta loca por conocer a Estefanie.

-¡Lo que me faltaba! –Jack dio una patada al sillon –oh, joder –ando cojeando por el lugar

-¿No deberias hablar con ella? –David le miro con curiosidad –Digo, averiguar si lo sabia antes, si es asi porque no te lo dijo. –se quedo pensativo –Y que hace aquí, no parecia muy sorprendida de verte. Y las mujeres son muy vengativas

-Mierda, tienes razon –Jack miro la puerta de su despacho –Voy ha hablar con ella

-Suerte –David se acomodo en el sillon -¡Te espero para que me informes!

Jack salio de alli dando un portazo. Su amigo al contrario de ayudarle lo ponia mas nervioso. Atraveso el pasillo sin mirar a ningun empleado, todos lo miraban con curiosidad. Cuando llego a la puerta del despacho de Estef, se paro ante ella y su rostro se crispo. La puerta estaba entreabierta y podia escuchar sus risas.

-Oh vamos Julio –Estefanie reia divertida mientras se apoyaba en la mesam justo frente a donde el estaba sentado –No pudo ser para tanto

-De verdad que me fuiste de gran ayuda –el le guiño un ojo –Nunca habia visto al señor Falcone tan abstraido en una reunion y relajado –el sonrnio –Tienes que venir con falda mas a menudo

-¿Eso no es un poco machista? –Estef le miro con una ceja levantada

-Para nada –el fruncio el ceño –Lo que es un desperdicio es que una mujer como tu no luzca esas bonitas piernas.

-Vas ha hacer que me sonroje –Estef miro hacia la puerta y vio una sombra

-Empiezo a pensar que eso es complicado –el se acomodo en el sillon mirandola a los ojos

-No creas –se incorporo hacia delante, apoyando las manos en los reposabrazos de la silla y acercando sus rostros –Hay situaciones en las que puedo llegar a sonrojarme

-¿Interrumpo? –Jack abrio la puerta bruscamente y los miraba aguantando la respiracion

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