Capitulo 10: Una noche cargadita

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Termino de atar su tacon y bajo el pie al suelo, apoyo ambas manos a los lados de su cuerpo en el colchon. Se incorporo y camino hasta el espejo, se admiro, observo su pelo, su rostro, sus piernas.

-¿Estas segura de lo que estas haciendo? –se lo pregunto a si misma, pero no dio tiempo a respuesta. Se escucho l a puerta de la casa seguido de unos pasos subiendo las escaleras.

-¡¿Hola?! ¡¿Chicos?! –Jack frunció el ceño subiendo la escalera, se paro en mitad del pasillo -¡¿Estef?!

-¡Aquí!! –corrio a la comoda a por su bolso y tropezó, se apoyo en el mueble y respiro profundamente –Tranquila, estas actuando como una niña

-Hola –el abrió la puerta y se quedo en el umbral mirándola sorprendido -¿Dónde vas?

-He quedado –ella no le miro, respondió mientras ponía algo de brillo en sus labios –Es viernes

-¿Y los chicos? –Jack bajo la vista hacia su cintura, después a sus piernas, trago saliva despacio y la miro a la cara -¿Vas a dejarlos solos?

-No están solos –Estef se giro para mirarle –Estas tu aquí

-¿Qué? –el la miro horrorizado –No, no, no

-Si, si, si –ella sonrio y tomo su bolso –Tu decidiste venirte a vivir aquí¿no? –el empujo haciéndole a un lado y salió dela habitación caminando tranquilamente

-¡Tia estas guapísima! –Zoe abrió la puerta de su habitación con una sonrisa

-Gracias preciosa, vigila a tus hermanos –le guiño un ojo –No seais muy malos con Jack

-¡Espera! –el corrió tras ella y se paro en lo alto de las escaleras

-¡Deje la cena en el horno! –Estefanie salió de la casa y cerro la puerta

-Genial –Jack se giro y vio a los tres en mitad del salón Zoe cargando a Arthur y Martin a su lado, los tres sonrieron -¿Qué?

-Nada –Zoe se encogió de hombros mirándolo con maldad

-¡Quiero jugar! –Martin corrió hacia su habitación y regreso con la espada, una pistola de agua y rotuladores -¡Vamos defiéndete pirata! –y se lanzo contra Jack pegándole con la espada y echándole el agua

-¡Eh! ¡Para! –Jack se cubrió la cabeza -¡Augh!

-Anda –Zoe camino hacia Jack y le puso al niño en los brazos –Hay que cambiarle

-¿Qué? –Jack la miro horrorizado, entonces noto un golpe en su pierna, Martin seguía dándole con la espada

-Caca –Zoe sonrio y se encerro en su habitación

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