Lysette forever [Fanfic Corazón de Melón]

Capítulo 11

Alicia's POV

Quedan 2 horas para salir de casa y reunirme con mis amigos en la pista de hielo, tengo nauseas, el corazón me da pequeños vuelcos de vez en cuando y las mariposas de mi estómago no quieren dejar de volar.

Alicia: Ahhh ¡Odio esto lo odio lo odio lo odio! — ruedo por la cama abrazando mi almohada y luego la tiro al suelo y me deslizo hasta el final de la cama cual babosa — no quiero volver, maldito Ricardo, te sacaré los ojos con una cuchara

Alguien entra en MI habitación SIN llamar a la puerta en la que HAY un cartel que dice cláramente "Llamar antes de entrar" pero pfff, mi familia "obviamente" no sabe leer y entra cuando se le antoja.

Sucrette: Cariño deberías est... ¿De nuevo haciendo la babosa? Eso solo puede significar que no tienes muchas ganas de ir ¿Cierto?

Alicia: Mamá... Ya sabes por qué no quiero ir — de nuevo esas mariposas, me siento en la cama con la piernas cruzadas y la miro — no volví a ver a Iván ¿Por qué? Tío Ken tampoco pudo contactar de nuevo con él... — me dejo caer en la cama y pongo mi mano sobre mi pecho, late con fuerza

Sucrette: Mi amor — besa mi frente — sé que significó mucho más que una amistad para ti pero, ya debes dejarlo atrás, si os volvéis a encontrar será una señal del destino y solo así sabrás que es el adecuado, mientras tanto vive tu adolescencia, aunque no la vivas demasiado que a tu padre ny a su hacha no les va a gustar — me río y le tiro una almohada a la cabeza — eyy ¿Qué te dije de no tirarme almohadas?

Alicia: Fue tu culpa — vuelvo a reir

Sucrette: Vamos cariño, ve a ducharte, te llevaré yo, hace frío y no me parece bien que vayas andando, podrías resbalar

Alicia: Está bien — resoplo y la miro alzando una ceja porque aún no se va

Sucrette: Está bien está bien — se levanta y sale por la puerta, si, esa misma a la que no ha llamado antes

Después de que se fuera saco unos leggins negros y unas botas, una sudadera con capucha gris la cual tiene a un gato en la parte delantera y en los cordones que atraviesan el gorro al final unos pompones blancos.

Alicia: Sigo sin querer ir — cogí la foto de Iván y la metí en el cajón más bajo de la mesa — adiós

Terminé de ducharme y la verdad que tarde muuucho, el agua estaba muy calentita, y cuando me quise dar cuenta ya había terminado el listado de canciones que tenía para la ducha. Eso significaba una cosa.

Alicia: ¡DE NUEVO LLEGO TARDE! — salí rápido y dando saltos me metí como pude en los leggins, odio ponérmelos con la piel mojada pero no sabía que iba a perderme de nuevo

Sucrette: Hija — me sobresalto y la miro

Alicia: Mamá, creo que los carteles no son lo tuyo

Sucrette: Bueno, eso de llegar a tu hora tampoco es tu fuerte — ríe — corre, peinate por el camino

Hice caso, cogí el peine y comencé a cepillármelo, también agarré mi gorrito de lana oso panda y unos guantes azul claro.

Llegamos en 15 minutos por el maldito tráfico, ya iba 10 minutos atrasada y había recibido como 3 llamadas de Ricardo y 2 de Jesús.

Corro porque en el lugar donde está la pista no pueden pasar los coches, ya estoy en el lugar, voy a sacar la entrada que me dieron mis amigos préviamente y ¡Joder no la tengo!

Alicia: E-espere... Estoy segura que la guardé — comienzo a ponerme nerviosa y a dejar pasar gente mientras el muchacho que espera la entrada no me mira demasiado bien

Trabajador: Oye chica, si intentas que te dejemos pasar por tu cara bonita ya puedes est... — alguien pone una mano en su hombro

Trabajador2: Oye, no deberías ser tan malo con las chicas, estoy seguro de que esta señorita no haría nada así ¿Compró la entrada por internet?

Alicia: Me la dieron unos amigos, deberían estar por aquí... — dije en voz baja sin perderme detalle de esos hermosos ojos

Trabajador2: Pues pasa y los buscamos juntos ¿Está bien Alicia?

Alicia: ¿Cómo me has llamado?

Trabajador2: Es tu nombre ¿No? — dice poniendo su mano en su barbilla

Alicia: Lo es pero cómo... ¿Iván?

Iván: En carne y hueso, me alegro de volver a verte

Alicia: Después de tantos años — dije cortante, me arrepentí al instante

Iván: Ya, me metieron en un instituto privado y ya sabes, ya tengo 18 y salí en cuanto pude, y ahora trabajo para poder independizarme

Alicia: Han pasado 10 años ¿Cómo puedes recordarme?

Iván: Del mismo modo que tu recuerdas que han pasado 10 años — sonríe y mi corazón late con fuerza, no ha cambiado nada, bueno, si que cambió algo, hace 10 años no llevaba ese colgante con forma de medio corazón que pone "Forever"

Alicia: ¿Cómo se llama tu... Novia? — al decir eso se me ahogan las palabras, quiero comprobarlo

Iván: Sofía — dice cortante y percibo como se tensa