Capítulo XVIII

31 4 0
                                    

Continuamos caminando por ese pasillo, que al parecer era interminable, hasta que por fin llegamos al final.

El final del pasillo consistía en un muro sólido. Éste tenía escrito el signo del diablo, y a un costado decía:

“Cuidado con el camino que eliges. No querrás morir, cierto?”

Al principio, Ethan y yo nos miramos confundidos. No sabíamos a qué se refería con eso. Pero luego de mirar a los costados, no dimos cuenta. A ambos lados del muro se extendían otros dos largos pasillos. Ambos estaban muy oscuros dentro, casi tanto como el que acabamos de cruzar. Ethan y yo nos miramos, y decidimos ir por el izquierdo. Dios, si ustedes hubieran estado aquí, estarían muertos del miedo. Todo estaba oscuro, y se escuchaban gritos, como el pasillo anterior, sólo que más fuerte. Tanto Ethan como yo nos sobresaltamos al escuchar un grito agudo; el grito de Annie.

Ambos apuramos el paso hacia donde venía el mismo. Cuando llegamos a la puerta, ésta toda blanca sucia con sangre, estaba entreabierta. Silenciosamente Ethan y yo nos asomamos por la misma. Me asusté al ver a Annie hablando con una chica: Sabannah. Habíamos encontrado a Sabannah. Habíamos encontrado a una de tres personas.  Ethan me miró al mismo tiempo que yo lo vi a él. Pensábamos lo mismo: Si Sabannah y Annie estaban aquí, quería decir que Emily y Luke no estaban tan lejos. Nos quedamos escuchando lo que hablaban.

-Esa no era la idea. La idea por la que le dije a la inepta de Emma que viniera aquí, era porque tú supuestamente no podías adentrarte a este mundo. O eso vengo pensando todos estos años. Hasta los jefes del Senado del Infierno me dijeron lo mismo. No puede haber posibilidad alguna que tú puedas haber pasado, Annabelle.- dijo Sabannah, con el ceño fruncido. Yo no entendía. El Senado del Infierno? Qué era eso?- Dime cómo entraste, ya.

-No te lo diré, Sabannah. No lo haré.- le respondió Annie. “Bien ahí, Annie!” dije para mis adentros.

-Escucha, Annabelle. Si no quieres ver a tus lindos amiguitos muertos o lastimados, respóndeme. Si sabes lo que te conviene, habla. No querrás ver que ya nadie te podrá salvar. Ellos ya están muy cerca de esta habitación, sabes Annie? No me costará nada salir por esa puerta e ir a buscarlos por el pasillo. –vi en la cara de Annie preocupación. Yo prácticamente rezaba para que no le pasara nada. Annie nos había ayudado mucho en este gran problema que nos metimos. No quería que le pasar nada.

Luego de un minuto, en el que Annie se quedó pensando, por fin habló.

-Bien, te lo diré-dijo Annie, rindiéndose.- Pero, por favor, no le hagas daño a Ethan y a Emma. Ellos tienen el libro que tú necesitas y el collar que Steffanie necesita. No creo que te quieras arriesgar a perder el tan valioso libro, sabes?

-Ya, Annabelle. Deja de dar tantas vueltas y dilo de una maldita vez por todas.-dijo Sabannah con fastidio.

-De acuerdo.-Annie suspiró.- Recuerdas al duende Radu?-Sabannah asintió- Bueno, el otro día fui a su cabaña, le conté lo que pasó y que tendría que venir aquí. Él me dijo <<Pero es riesgoso, Annie. Te puedes ir al otro lado si llegas a cruzar a ese lugar. >>, a lo que yo le respondí <<Pero lo necesito, Radu. Entiéndelo. Emma es mi amiga. Ella sufre lo que yo sufrí con Sabannah. Necesito ir allí. >> Él suspiró, y luego dijo: <<Escúchame, Annie. Tengo algo para darte. Como ambos sabemos, esto es riesgoso, pero yo tengo una poción que necesito que tomes antes de traspasar el portal. No quiero que termines herida. Si algo te pasa, tu papá me matará por ello. >> Yo asentí, y acepté el frasco que Radu me dio. Era un líquido verde que bebí antes de traspasar el portal que me traía aquí. Y sorpresivamente, si no fuera porque estoy aquí capturada por ti, sigo... viva… de algún modo.

Ok. Cuando salvemos a Annie, ella me va a tener que explicar unas cuantas cosas importantes para mí. Creo que necesito saber qué es el Senado del Infierno y quién se supone que es el duende Radu.

-De acuerdo, pensé que nunca jamás iba a escuchar del horrible y antipático del duende Radu en toda mi vida.

Vi que Annie se encogía de hombros.

-Nunca sabes qué puede hacer el Senado con todas las criaturas de este mundo.

Cuando miro para arriba, veo que Ethan está igual que yo. Más confundido que cualquier otra cosa. Le hago señas para que salgamos de allí. Necesitaba hablar en un lugar privado con él. Sólo para aclarar las cosas. Creo que ambos necesitamos hablar sobre esto.

Él responde a mi seña con un asentimiento. Cuando ambos vamos a salir, la pierna de Ethan se enreda con la mía y ambos caemos al suelo, lástima mente del lado de adentro, quedando yo debajo de él y él encima de mí. Incómodo, lo sé. Pero no más incómodo que darse cuenta de que Sabannah y Annie nos estaban mirando, ambas con caras de sorprendidas. Definitivamente, ellas no esperaban que nosotros seamos rápidos en llegar hasta esta habitación.

-Oh, vaya vaya. Mira quién están aquí. Steffanie tiene que saber esto. Pero antes…-Sabannah se dirigió a nosotros, que seguíamos mirándonos mutuamente debido al incómodo momento, y nos levantó del suelo brutamente. Nos ató de manos a unas cadenas que estaban adheridas a la pared, y se paró enfrente de nosotros.- No pensé que ibas a ser tan valiente como para llegar hasta aquí, Emma.-me dijo.

Yo la miré con odio y dije:

-Bueno, que mal que no esperaras esto. Pero aquí estoy. Y sabes Sabannah? Ya nada me da miedo. Si pude adentrarme por ese horrible pasillo,-apunté con la cabeza la puerta- ya mí miedo se ha ido. Ahora sólo quiero recuperar a Luke, y como te habrás dado cuenta, él a Emily.-dije, apuntando con la cabeza a Ethan.

-Bueno, sigue así, Emma. Ahora, noviecitos, ¿Quieren ver a sus queridos amigos?

-Sí.- dijimos al unísono, muy esperanzados. Ni siquiera nos importó que ella nos haya llamado novios. Estábamos ansiosos por ver a Emily y a Luke.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 18, 2014 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

The Following PAUSADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora