~ мι σρυεsтσ ~ 𝓒𝓱𝓻𝓲𝓼𝓔𝓻𝓲𝓬𝓴

Capitulo 20

Ya habían pasados unos mese, ya nos habíamos mudado a una casa, por suerte todo resulte mejor de lo penado, ahora Caramelo tenía un patio a donde salir a jugar con nosotros todos los días.

La casa tenía tres cuartos, con Chris habíamos decidió que adoptaríamos a dos niños o bebés.

Y ahora estábamos llendo al orfanato, estaba muy nervioso, primero iríamos a ver a los bebés pero para pasar a ir a verlos pasaríamos por un lugar repleto de niños y niñas. Habíamos decidido adoptar a los dos primeros con los que hagamos una adopción sin importan si fuera un niño o un bebé y sin importar el sexo.

Por fin habíamos llegado y cuando pasamos por el lugar repleto de niños ninguno se nos acercó, así que decidimos seguir de largo para ver los bebés y capaz que después regresáramos. Al llegar a ver los bebés las señoras encargadas del lugar estaban tratando de calmar a dos de ellos, uno parecía un niño y otra una niña.

Nosotros le pedimos si nos lo podía dar para ver si podíamos calmarlos y así fue, yo agarre a la niña y sentí una conexión con ella, mientras yo la acunaba y le cantaba ella se me quedaba bien con sus hermosos y grandes ojos color verde, era pálida y tenia el poco pelo que tenía negro, simplemente era hermosa, en ese momento supe que la teníamos que adoptar.

A Chris le pasó algo similar, él niño también era pálido y lo poco que tenía de pelo también era negro pero sus ojos eran color miel.

Ambos nos miramos a los ojos y supimos que teníamos que adoptarlos a ambos, las señoras nos contaron que tenían seis meses y eran mellizos, su madre los había llevado al orfanato cuando apena tenían unas semanas ya que no los podía cuidar, solo les dijo que se llamaban Catherine y Cole y que por favor los cuidadaran.

Ambos les dijimos a la señora que nosotros los adoptaríamos y los cuidaríamos como si fueran nuestra vida.

Una semana después nos dieron a los bebés, nosotros en ese tiempo terminamos de decorar y llenar sus cuartos.

Por fin nos dieron a nuestros bebés, Cole Vélez Colon y Catherine Vélez Colon, ambos bebés en todo el viaje se quedaron calladitos y tranquilos, mirando por la ventana del auto, obviamente estaban sentados en sus sillitas.

Al llegar a casa decidimos que se los presentaríamos a Caramelos y desde el primer momento él se encariñó con ellos, supimos en ese momento que ya sería imposibles separarlos y que él hasta se quedaría con ellos al dormir y seguramente se turnaría...

Y en ese momento nuestra pequeña familia de tres pasó a ser una gran familia de cinco y llena de amor.