Amor Real

15

Capítulo quince

Sofía

Creo el celular sonó más de 10 veces.
_Hola
Mire la hora y era cerca de mediodía y seguía en la cama Federico dormía a mi lado, me levante y fui al balcón
_Sofía ¿dónde estás?
_Emma? Estoy En el hotel con Federico ¿Qué pasa?
_Tienes una computadora a tu alcance
_he, si acá hay una, que sucede?
_Préndela y entra al diario ya
_Bueno espera.

No podía prenderla después de un rato lo logré, pero al entrar al diario me quede helada.
_ ¿Que?
_Encontraste a tu príncipe azul solo que se destiñe
_Tengo que colgar
La noticia tenía fotos de los dos muy apasionados en el bar, yo sentada en sus piernas, bailando pegados, su mano en mi trasero. Mierda esto era humillante. Decían cosas horribles, me tildaban de mujerzuela, de buscarlo por dinero y hasta sacaron la historia de la niña huérfana. Me cambie rápido de ropa y salí de ahí tenía que huir de ese cuarto y pensar que carajos pasaba, quien era ese tipo.
Llegue a casa, me bañe y me senté en el balcón a pensar que hacía desde ahora.
_ ¿Sofía?
Él estaba parado en la playa frente a mi viéndome confundido, se lo notaba cansado y hermoso.
_ ¿Qué haces acá?
_Porque te fuiste, te busque por todos lados y no contestas el celular.
_ ¿Quién eres?
_Soy yo
_Eres un príncipe, eres el príncipe de Suecia
_ ¿Como lo sabes? Bueno si, déjame explicarlo
subió por la terraza y se colocó frente a mí, era grande imponente y hermoso y estaba destrozándome entera
_Que me vas a explicar, que yo fui como dice, exactamente tu amor de despecho
_ ¿De qué hablas?
Agarré mi celular busqué la noticia y se la di para q la lea
Su cara se fue trasformando y se lo notaba furioso respiraba rápido y su seño estaba fruncido.
_Que hijos de.. déjame explicar esto por favor
_Soy una chica que solo está contigo por tu dinero y posición que mierda es eso, no sabía ni quien eras
_Nunca pensaría eso Sofía eres la única a quien he abierto así mi corazón y la única que quiero en mi vida nunca pensaría eso, déjame explicar porque no te dije quién era.
_No quiero, ahora no, rompiste mi corazón necesito distancia, necesito que te alejes de mí.
_Déjame decirte todo, nunca te mentí solo no te dije cuál era mi título, te lo intenté explicar muchas veces pero siempre había algo más.
_Por favor vete no me lastimes más, no juegues más conmigo, para que hiciste esto, ¿cuál era tu juego? enamorarme hacer que este loca por ti y volverte a Suecia para casarte con alguna chica rica y hablar de la idiota hawaiana que se creyó el cuento.
_Nunca haría eso, me duele que pienses así de mi
_Adiós Federico Olsson III
_Sofía por favor, no quiero irme no así.
Entre a la casa y trabe todas las puertas, me metí en la cama a llorar, oscureció y sentí que golpeaban la puerta me levante dispuesta a pelear más.
_Amiga
_Emma
La abrace y me desplome, llore mucho me dolía el cuerpo la cabeza y el corazón
_Tranquila acá estoy vamos hablar, traje pizzas y helado
_Eres la mejor
_ ¿Que paso?
Le conté todo le dije hasta el más mínimo detalle de lo que sucedió hasta lo que me hacía sentir, lo que lo amaba.
_Ya lo solucionaremos ahora vamos a cuidarte a ti
_Porque estas toda producida
_Venia de una reunión de negocios que salió mal
_?Con quién?
_Larga historia ahora hablemos mal de los hombres.
Me dormí hablando de los imbéciles que son los hombres y como nos hacen daño a las mujeres.
_Sofí tengo que irme a la oficina
_ ¿Qué hora es?
_Las 11 quieres venir
_No voy a surfear necesito despejarme.
_Te veo después.

Agarré mis cosas y salí a surfear tenía que distanciarme de todo.

Pasaron más de dos semanas y no supe casi nada de él, Emma me contó que dejo pagado de más y que se fue al otro día de nuestra discusión, hizo lo que le pedí, pero igual dolía, lo extrañaba.

Volví de trabajar y había un paquete en la puerta, lo entre y lo deje arriba de la mesa no tenía remitente dudaba en abrirlo así que lo dejé, después de cenar moría de intriga y lo tuve que abrir, saqué el paquete estaba envuelto en un papel rojo era un libro bastante viejo en la tapa decía que era una primera edición de El amor en tiempos de cólera mi libro favorito con una carta dentro.

Sofía:

No puedo pedirte que me perdones por una carta, pero me hubiese gustado poder explicarte todo mirándote a la cara.

Soy un príncipe, pero en todo momento contigo me sentí un rey, me sentí único y especial, nunca dejaste de hacerme sonreír, daría todos mis títulos y toda mi riqueza para poder demostrarte que estar juntos era nuestro destino. Pero no pude, quería decirte que a pesar de la distancia voy a estar para ti siempre, tienes que saber que yo quisiera quedarme a tu lado, aunque no debo y que muero por llamarte y repetir nuestra historia una y otra vez, pero no puedo.
No es justo irme sin ti, tampoco es justo que te pidas que me entregues tu vida o que te enamores de mi cuando no voy a estar ahí cuando llores, cuando me necesites.

Pero no pude evitar separar las cosas, no pude evitar enamorarme de ti.
No hay nadie más, no puede haberlo, después de ti no hay nada.
Lo siento por todo, nunca quise lastimarte.
Te amé y te aun te amo.
Federico.

Caí al piso llorando, era lo más dulce y doloroso que me habían escrito alguna vez. Llame a la única persona que podía ayudarme
_Emma tengo que ir a Suecia.