Oh cielo santo, el techo está temblando.
Mi familia está alterada, se arrastra hacia todas direcciones. No sabía qué hacer, pues siempre habíamos vivido en paz y tranquilidad, y siempre habíamos estado juntos. Pero ahora todo era caos. Toda mi familia se arrastró hacia la superficie, a donde salía el sol.
Me había quedado atrás, por lo que también empecé a arrastrarme hacia la superficie para reunirme con mi familia. Hacía un túnel con muchas curvas, por el que me deslicé sin ninguna dificultad. Podía darme cuenta de que estaba cada vez más cerca de la superficie cuando notaba raíces y sentía que la tierra era cada vez más caliente y seca.
Llegué a la superficie. Al principio me sentí cegado por los rayos del sol, los cuales afortunadamente no me podía lastimar la piel debido a la baba que cubría todo mi delgado cuerpo. Cuando ya no estaba tan cegado, pude ver el horror. Mi familia estaba siendo arrancada de la tierra, devorada, por bestias gigantes cubiertas de plumas y de hocico largo y puntiagudo. Algunos miembros de mi familia eran llevados al cielo entre el hocico de esos monstruos. No sé a dónde se los habrán llevado.
Supe que era mi fin cuando una de las bestias había aterrizado frente a mí, con dos de sus grandes extremidades (Igual cubiertas de plumas) extendidas, que luego ocultó, y aproximando su largo y puntiagudo hocico hacia mí, preparado para devorarme como a mi familia.
¿Qué hubiera podido hacer para defenderme? Si mi especie ni siquiera posee extremidades.

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Cuentos
Historia CortaUn compilado de cuentos, producto de mis ocurrencias. Además de que sirve para mantener con vida este perfil. Comenten su opinión, sean sinceros. Quiero mejorar en mi escritura, y este libro me puede servir para adentrarme en el amplio mundo de la e...