Flores de cerezo ➳ HyunSung

여덟 ; 8

(febrero 2018)

Nada parecía ser real, finalmente tenían su fecha de debut, y todo estaba yendo en marcha para cumplirse a la perfección y Jisung se desvelaba cada vez más para poder producir piezas perfectas para sus fans.

Alguien tocó la puerta de su estudio, y pasó sin esperar respuesta; era Hyunjin quien entró con un ramen y botella de gaseosa en sus manos.

Le sonrió rápidamente y se sentó a su lado:

—Creí que tendrías hambre, estás trabajando mucho...

—Gracias Jinnie~ —murmuró débilmente antes de comenzar a comer, y escuchar una risa por parte del contrario. Tragó y levantó una ceja. —¿Qué?

—Esto es raro, ¿Sabes? Hace algunos meses nos odiábamos y no podíamos pasar tiempo en la misma habitación sin pelear o gritarnos, y ahora... Soy Jinnie y tu Jisunggie...

Jisung también sonrió con nostalgia y asintió. —Supongo que maduramos e inconscientemente aceptamos que pasaríamos mucho tiempo una vez debutaramos... Y lo agradezco... Conocí a una persona completamente distinta a la que creí que eras.

—Sobre eso... ¿Qué creías de mí?

—Un niño mimado, sin talento, criticón, mandón, siquiera un hyung, solo una cara bonita... —se encogió de hombros.

—Todas esas palabras que me dijiste en su momento... Sí consiguieron lastimarme... —dijo con pena el mayor, obteniendo la completa atención del contrario. —Pasaba noches juzgandome porque no hacía nada bien, no estaba al nivel del grupo y que tal vez debía rendirme... Pero por otro lado, me hicieron más fuerte y me hicieron querer demostrar que tenía mucho más para brillar que una cara bonita...

Un nudo se formó en la garganta de Jisung, y no supo qué responder. En ese tiempo había conocido la verdadera persona frágil y talentosa que era Hwang, y se arrepentió completamente de sus palabras, siendo consciente de lo mucho que lo había lastimado.

—Yo... Hyunjin... Lo siento... Era inmaduro, solo quería debutar... Te veía como un estorbo... En serio perdóname, quiero creer que ya no soy así. —dijo apenado.

—Está bien Jisunggie... —acarició su cabello haciéndolo sentir más vulnerable que nunca. —Si sirve de consuelo, también eras lo peor para mí... Pero creo que eres más fuerte; realmente te admiro por eso... Yo debería decirte hyung. —trató de animarlo.

Tal vez fue la hora o la situación, o las noches llorando a causa de la culpa por todo lo que había hecho sentir al contrario, pero Jisung se prometió no volver a lastimar a Hyunjin en lo que su amistad durara, sin importar él o el salir dañado; sólo quería que Hyunjin nunca dejara de brillar como él le había demostrado que era capaz de hacerlo.