사십삼 ; 43

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Han, después de tanto tiempo, recordó que los sentimientos no entendían de barreras o límites; ellos siempre harían lo que quisieran, y elegirían su destino sin atender a las consecuencias.

Pasar el día con sus dos personas favoritas en el mundo había resultado mejor de lo que esperaba; asustándose con palomas y grabando muchas cosas para stay. Pero como era de costumbre, siempre sucede algo al final, que consigue dejarte con un amargo sabor de boca.

Minho había sido el elegido (mediante piedra, papel o tijera) para pagar por sus helados, por lo que cuando se fue, y dejó solos al par, no perdieron el tiempo en hablar a la vez.

—Tengo que preguntarte alg...

—¿Andas bien ultim...

Ambos se quedaron callados y sonrieron.

—¿Qué querías preguntarme, Jisung? —habló primeramente el mayor de los dos.

—No, tú primero, lo mío no importa. —le devolvió una sonrisa de aquellas que sólo él lograba causar en sí.

—Bien... Pero no creas que ando vigilándote todo el tiempo... Solo estoy preocupado... Últimamente te he visto decaído... ¿Sucede algo?

La garganta de Jisung se secó inmediatamente e intentó saber qué decir, hasta recurrir a su mejor y más conocida excusa.

—No es nada, solo estoy preocupado por el comeback, el aniversario, ya sabes... Nada malo. —sonrió débilmente, y antes de que Hyunjin pudiera reclamarle insatisfecho por su respuesta, llegó Minho a salvar la situación.

Flores de cerezo ➳ HyunSungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora