He notado que cuando estamos juntos hay veces en las que me quedo mirándote un segundo y pienso en lo afortunada que soy por tenerte a mi lado. Junto a mi.
También hay veces en las que me quedo mirando al espacio más vacío en un lugar y pienso en ti cuando no estamos juntos, y recuerdo cada sensación al estar contigo.
En las clases sobre todo.
Recuerdo ese sábado, no lo siento tan lejano, en el que, yo sentada sobre ti, me reía en primer lugar por lo nerviosa que estaba.
Y es que es cierto que eres la única persona con la que haría algo como lo que hacemos.
Estaba nerviosa, pero luego me sentí totalmente libre de morderme el labio por las sensaciones que sentía en aquel momento.
Te besaba y tú a mi, sentía el amor brotando sobre nosotros. Sentía cada una de las señales que me habías dado desde que nos conocimos, tal vez estuvimos destinados desde antes...
El ritmo de nuestros cuerpos tal vez van muy coordinados, siento la química cada vez que estamos cerca. Y la sensación de subir con tal que sentirte. Lamento decírtelo así pero estoy loca por la manera en la que tratamos de hacer eso. En la manera en la que tratamos de hacer lo que sea que sea aquello. Aquello que me encanta y si, también me encantas tu.
He estado soñando mucho, imaginando mucho y si me ves mirando hacia la nada con una mirada firme es que probablemente esté recordando ese momento.
Ayer también fue todo un recuerdo.
Cada día contigo es un recuerdo nuevo y amo tener nuestros recuerdos tan frescos en mi mente.
Amo el hecho de pensar en ti...
En la manera en la que te pienso, hay diferentes maneras pero en cada una de ellas me haces feliz.
Espero que también pienses en mí cada vez que despiertes, que tomes una siesta o antes de ir a dormir.Part 2.
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Sin salida.
Teen FictionA veces pensamos que todas las soluciones a nuestros problemas se arreglaran llorando. Las lagrimas no son la salida.