Vámonos A Marte.【rusméx】

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Ya hace varias semanas, México le estaba dando clases de español a su querido amigo, a la vez que este se hospedaba en la alegre casa.

En sus tiempos libres (y cuando el mexicano salía), Rusia 'exploraba' aquella casa. Claro, le pedía permiso para que, si lo veía revisando cajones o algo por el estilo, no se molestara.
Aún así tenía prohibido abrir ciertas habitaciones y cajones.

Un día en el que México tenía una reunión con Chile y Argentina, Rusia buscaba alguna botella de tequila, ya que sabía que había una reserva para ocasiones 'especiales'.
Término encontrando todas las cartas anónimas que le enviaba a su amado, todas milagrosamente ordenas, en una caja debajo de la cama del mexicano.

¡Vaya! La carta más reciente era de hace dos meses... ¿Enserio había pasado tanto tiempo?

Busco una pluma y una hoja para poder dedicarle otra canción. En esa ocasión, escribiría "10 pasos hacia ti". Una canción bastante linda, en su opinión.

Al final, puso una pequeña disculpa por la tardanza, obviamente, en español y letra cursiva para que no reconociera que él era quien las enviaba. Buscaba un sobre más no encontró nada. Con otra hoja hizo un sobre casero.

Dejó la carta en una de las macetas colgantes que había en la entrada de la casa, pues siempre las solía dejar ahí.

[...]

Aproximadamente dos horas más tarde, el mexicano ya estaba llegando a su casa, con cara molesta, maldiciendo mientras caminaba hacia la puerta y sacaba la llave. Puso la llave en la cerradura de la puerta hasta que vio algo blanco sobresalir de una de las flores que había plantado en esas macetas.

Agarro el sobre y lo abrió para leer el contenido de la carta.
Su cara mostraba una boba sonrisa, mientras que un tono carmesí adornaba sus mejillas.

Rusia estaba mirando desde la ventana de la sala la cara de su querido México. Vió que ya estaba abriendo la puerta, se acomodo en el sillón, prendió la televisión y justo estaban pasando "La Rosa de Guadalupe".

- ¡Hola tripaloski! - dijo con un tono alegre. Todavía tenía la carta en mano.

- Hello Tequila. - habló con cierta naturalidad, como si no lo hubiera espiado hace apenas unos segundos. - Hey, What have you got there? [¿Qué tienes ahí?] - pregunto apuntando a la mano del mexicano que sostenía el papel.

Preguntaba eso para no parecer "sospechoso".

- ¿Qué? - miro su mano avergonzado y la escondió detrás de su espalda, cambiando su expresión y sonrisa a una nerviosa.

- That. - iba a seguir insistiendo para que la actuación fuera más real. - Oh, come on taquito, you know you can trust me. [Oh, vamos taquito, sabes que puedes confiar en mi.]

Aprovecharía para saber que piensa ante esos pequeños detalles que le dejaba.

El mexicano se sentó junto a el ruso, recargandose y soltando un suspiro típico de un bobo enamorado.

- Verás... hace tiempo, no se cuanto exactamente, me empezaron a llegar cartas, ¡Pero no simples cartas! Si no que tenían letras de canciones en español, y todas esas canciones... - soltó otro suspiro. - son hermosas. Creo que me enamore.

Gracias a las clases que le daba a Rusia, no tenía que hablar inglés para poder comunicarse.

- Do you know who sent you letters? [¿Sabes quién te envía las cartas?]

- No, ¡pero juro por la virgencita que no importa quien las haya mandado! Yo le amaré igual.

Se cubrió la cara, su rubor era bastante notable. El ruso lo miro, enternecido por los encantos de su "amigo".

Tenía una oportunidad, pero... no se iba a declarar tan pronto.
Planeaba hacerlo llevándole 'serenata'.

Aquí su escritora irrelevante no favorita.¿
Esta todo feo, perdón, pero me agarro la inspiración. <3
Siento que es más relleno que nada, o tal vez no, pero la historia es de amorts y no tanto drama.

¿Esta muy corto o así esta bien?

Espero lo hayan disfrutado, y, ¡hasta la próxima actualización! uwu