5/5

1.1K 122 32
                                    

Billy estaba acostado, cerró los ojos tratando de dormir. Pero algo no lo dejaba en paz.

Decidió salir a tomar aire.

Todo era tan tranquilo que de verdad se preguntaba si esto era Fawcett City u otra ciudad más tranquila de lo normal.

«Tal vez los bandidos están drogados o ya están dormidos a esta hora» recordó lo que alguna vez Freddy le había dicho.

Sonrió por inercia.

Y tal vez ya sabía porque no podía dormir. Pues Victor le había dicho que el día siguiente harían esa operación. Le dejó días de más para que lo pensara, pero no lo obligaría a no hacerlo. Sería totalmente la decisión del menor.

Suspiró y frotó sus manos en sus hombros. El frío siempre era característico de ahí, haciéndolo recaer que si era Fawcett.

Al igual que el recuerdo de Clark y su maldita sonrisa recayó en sus pensamientos.

Un suspiro salió de sus labios temblorosos.

Al menos podía usar esos recuerdos para sentirse bien con el mismo. Si, se preguntaba si era lo correcto pero al entregarse a Clark creía que por muy mal que haya sido, le encanto. Le encanto saber que él fue su primera vez. Que era la persona que tanto añoraba.

Tosió. Tosió de nuevo.

Algunas hojas del árbol se mancharon de su sangre, haciendo ver que era más y más y más.

Billy sabía que era mañana o nunca.

El mago Shazam tal vez tenía razón. Cuando se alejó de toda persona del exterior era por eso, porque a veces nunca se puede confiar de alguien. No. Ni mucho menos sabes que cosas extrañas se puede encontrar.

Como toser pétalos de rosas.











Victor hablaba con su padre mientras que Billy se acomodaba en aquella cama que tenía en su pequeño "consultorio" en el laboratorio.

El menor miraba todo con miedo. Desde aquella luz roja hasta el mismo sonido que esa misma crea.

Su respiración comenzaba a acelerarse.

Le había dicho a Freddy lo que iba a hacer. Este obviamente le pidió acompañarlo, porque aquel "Yo estoy y estaré aquí pase lo que pase, Billy" era de verdad.

Pero se negó. No quería que lo viera así. Tan mal. Y mucho menos en esa situación donde perdería todo. Pero a veces uno tiene que dar para tener.

Suspiró rendido.

El miedo comenzaba a aparecer en él y unas tremendas ganas de salir corriendo le inundaron.

Pero se quedaba firme. Como siempre lo haría siendo o no siendo Shazam.

Sonrió cerrando los ojos.

Pensando en Clark.

La primera vez que lo vio.

Su sonrisa.

Sus gestos.

Su amabilidad.

Sus ojos.

Hanaki Disease Donde viven las historias. Descúbrelo ahora