Numbers (Randy español)

Capitulo 31

* Pov de Rye *

Mi lápiz voló sobre el papel mientras trabajaba para hacer la tarea. Ya me voy a atrasar en las clases que salté, y no necesito la tarea en esta clase para ayudarme a fallar.
Cuando estaba a mitad de la tarea, mi profesor se aclaró la garganta y juntó las manos una vez para llamar la atención de todos. Yo, como todos los demás, levanté lentamente la cara al mirar el papel para mirarlo.

El hombre rechoncho, con solo la punta de su cabeza calva y brillando a la luz, comenzó a caminar de un lado a otro por el frente del aula, diciéndonos que todo sucederá pronto. Al darme cuenta de que lo que estaba diciendo no era tan importante, volví a mirar mi papel y comencé a escribir de nuevo.
Fue un poco difícil ver las palabras que ya había escrito, debido a mi ojo hinchado, pero de todos modos lo logré.

"Señor Beaumont". El profesor se aclaró la garganta, y levanté la cabeza para mirar su cara.

"Lo siguiente que voy a decir es bastante importante, así que apreciaría que si me escuchas", asentí con la cabeza y senté mi lápiz en el escritorio, sintiendo los ojos de muchos estudiantes sobre mí.

Él me miró por unos segundos más antes de continuar con lo que había estado diciendo

"Como algunos de ustedes pueden haber escuchado, hubo rumores de un mitin de pepitas hoy. Bueno, esos rumores estaban equivocados. No hay un pep pepinillo , pero todos en la escuela se reúnen en el gimnasio por una razón específica ".

Un estudiante levantó la mano y los ojos del profesor se dirigieron lentamente hacia él:

"Sí, Liam".

"¿Por qué, exactamente, nos reunimos allí si no es un mitin de pep?" Volvió a bajar la mano y miró al profesor, esperando su respuesta.

"Estoy seguro de que les explicarán todo eso a ustedes, estudiantes, cuando lleguen allí".

Miró el reloj que colgaba en la pared antes de mirar a los estudiantes.

"Ahora, es hora de que nos reunamos allí, para que todos pongan sus cosas en su casillero y vayan en esa dirección". Todos obedecieron rápidamente sus órdenes y uno por uno salieron del salón de clases.

Puse mis libros en mi casillero antes de seguir el flujo de estudiantes para llegar al gimnasio. El gimnasio ya estaba lleno, pero a través de todas las personas, pude ver una belleza rubia brillando a través de todas ellas. Andy me vio desde arriba en las gradas y me envió una hola amistoso.
Le sonreí al niño y le devolví el saludo. Justo cuando estaba a punto de llegar hasta donde él estaba sentado, una mano agarró mi brazo por detrás y me tiró hacia atrás ásperamente.

Me di la vuelta para mirar a Mikey, quien parecía preocupada como el infierno

"Qué demonios está pasando", susurró Mikey extremadamente agresivamente mientras apretaba mi brazo con fuerza.

"¿Cómo diablos iba a saberlo?" si alguno de ellos intentara escuchar nuestra conversación

"¿Y por qué estás tan preocupado de todos modos?" Caminando nos pasó,

"Porque no sé qué demonios son esos". Mikey hizo un gesto a las gradas que estaban alineadas yendo al gimnasio con lo que parecían personas de tipo científico en cada una.

"Y lo que me contaste sobre la policía bajo las gradas está empezando a afectarme".

Cuando observé las gradas, noté que en cada una de ellas había una máquina que era para probar el ADN y los polígrafos.

"¡Mierda, tenemos que irnos! Ahora", susurré gritando mientras tiraba de Mikey por el brazo. Una vez que las puertas estaban a la vista, pude ver que había demasiados Guardias en cada puerta. Me detuve en seco y miré directamente a la salida sin saber qué hacer.

"Sr. Beaumont, Sr. Cobban, ¿qué están haciendo ustedes dos?" Me di la vuelta para ver a un profesor mirándonos con una expresión confusa en su rostro. Mi mano soltó el brazo de Mikey y cayó a mi lado. Mientras recorría mi cerebro buscando excusas, el profesor me sonrió.

"Ve a tomar asiento, muchacho. El director comenzará a hablar en cualquier momento, ahora". Asentí con la cabeza ante sus palabras, ya que mi boca se había secado, y no había ninguna posibilidad de que pudiera decirle algo.

Mikey asintió con la cabeza en dirección a las gradas antes de comenzar a caminar de esa manera. Lo seguí rápidamente y miré hacia donde estaba sentado Andy.
Estaba sentado solo, sin nadie a mi lado, y miraba su regazo con tristeza. Tragué y me aclaré la garganta, finalmente pensando que podría ser capaz de hablar de nuevo.

"Vamos a sentarnos junto a Andy. Se ve solo". Señalé las gradas hacia donde estaba sentado Andy, y Mikey me miró como si estuviera loco.

"¿Andy Fowler?"

"¿Sí, por qué?" Lo miré con curiosidad, preguntándome por qué parecía juzgarme tan ardientemente.

" Es el imbécil que revisó tu cuaderno ", respondió Mikey.

" Entonces, eso no ... espera. No sé dónde está esa libreta ". Mi mente comenzó a correr, preguntándome si Andy la había vuelto a agarrar. ¿Qué pasaría si veía que escribí su número allí? Me va a entregar a la policía por ser gay. Mierda. Miré a Mikey, tratando de ocultar la obvia preocupación en mi rostro, y él me miró con una expresión que casi parecía culpable.

"Espera, no tienes idea de dónde está", preguntó.

"en mi casa ", respondí con un encogimiento de hombros, rezando para que Andy no lo tuviera.

Nos dirigimos a las gradas en silencio y subimos los escalones hasta llegar a la fila en la que estaba sentado Andy.

" ¿Están ocupados estos asientos? "Hice un gesto hacia el área alrededor de Andy mientras me miraba. Cuando vio que era yo, apareció una sonrisa en su rostro.

" No, estoy completamente solo, como de costumbre", respondió con una risa tranquila. Sus ojos se dirigieron a Mikey, y su sonrisa se desvaneció un poco.

"Hey Mikey". dijo débilmente, Mikey respondió con un gesto de cabeza.

La tensión incómoda entre los dos era bastante obvia. Me pregunto de qué hablaron ese día durante mi práctica de fútbol.

Me senté en el lado izquierdo de Andy, y Mikey se sentó en el asiento abierto a la derecha de Andy. Sus largas mangas estaban enrolladas, revelando su muñeca entintada.

Los ojos de Mikey se dirigieron hacia la muñeca de Andy, y pude ver sus fruncidos surcados de confusión. Andy nos debe haber notado a los dos porque rápidamente se volvió a bajar las mangas antes de mirar sus manos con un trago.
Volví la cabeza, fingiendo que nada de eso había pasado e intenté concentrarme en el director que ahora estaba tratando de que el micrófono funcionara. ¿Por qué Mikey estaba mirando la muñeca de Andy así? ¿Por qué estaba tan concentrado en eso? ¿Qué pasa si Andy no tiene mi cuaderno y Mikey es la que lo tiene? ¿Ha visto lo que hay en él? Soy un jodido idiota.

Hubo un ruido agudo y agudo que recorrió todo el gimnasio, lo que provocó que la mayoría de los estudiantes se taparan los oídos y gritaran incomodidad. Descubrí mis oídos para escuchar la risa incómoda del anciano.

"Lo siento, niños. De todos modos, empecemos".