El amor es azul

Ni muy muy, ni tan tan

No soy tan moreno, ni tan güero, ni tan alto ni tan flaco, ni tan simpático ni tan aburrido... Siempre he sido, así: tan a la mitad. Debo decir que eso me ha ayudado a lo largo de toda la vida a ahorrarme problemas: en la escuela no me molestaban, era tan normal que apenas se fijaban en mi, en la univerisdad era tan promedio que no afectaba a nadie, ningún profesor notaba si faltaba o asistía. Y así ha sido mi vida, un cómodo punto medio donde nadie me nota lo suficiente, pero tampoco soy ignorado. Tengo mi grupo de amigos desde la secu, nos reunimos a ver el fucho los domingos y beber algunas cervezas.

Conforme la vida ha ido pasando a las reuniones se agregaban novias y luego las esposas y ahora los hijos pequeños. Hacemos chistes sobre de la prepa, recordamos a los profesores, a quienes nos caían mal y celebramos los goles del equipo ganador. Esa costumbre se siguió con el Americano, ¡ah! las comilonas para ver el Superbowl y las pedas, pero tranqui porque hay niños.

En esas reuniones hablamos de cómo el país se está yendo al carajo, de como los más jóvenes no saben nada de la vida, de los achaques de los padres y los problemas cotidianos. Somos un grupo diverso, está a quien siempre le va mal, si lava el auto llueve, si tiene prisa todos los semáforos en rojos, si le toca hacer un trámite hay manifestación, ¡todo le pasa! y siempre se queja, hay veces que pienso que le pasa lo mismo que los demás, pero le da más importancia de la que debería. También está el que se cree un galán de 20 años, se ha divorciado dos veces y ahora sale con una chica 15 años menos que él, ¡allá él!. El otro es el grillero por excelencia, se sabe todos los chismes de política, quien es amigo de quien, la forma en que nos tranzan y esas cosas, la verdad tiende a ser cansado escucharlo siempre hablar del fraude electoral y de lo corrupto del sistema. Yo, yo soy el tipo que le gusta ir al cine a ver las pelis más taquilleras, me gusta llevar a mi esposa, es como salir de novios cada semana, se siente bien. Nunca me ha gustado causar mucho alboroto, considero que la atención es innecesaria y cansada, ser importante implica tener que cuidar todo lo que uno dice y hace y eso es demasiado esfuerzo. . A mi me gusta mi vida sencilla y sin complicaciones ¿qué no es a lo que todos aspiran?