Bon Bon Chocolat [JJK] COMPLETA

Capítulo 9 ☁

SooBin cenaba junto a su padre en aquella pizzería, habían decidido ir a comer algo ya que al hombre no le apetecía cocinar, un tema venía rondando en su cabeza desde hace un tiempo, sabía que no podía hablarlo con JungKook porque éste le diría que no pensara en ello.

— Papá—el hombre levantó la mirada de su pizza hacia su hija— ¿Crees que...mi relación con JungKook sea enserio? Me refiero a que...ya sé que ambos tenemos tres meses juntos, pero...no siento que sea una relación seria—miró sus ojos—Estoy muy insegura, sólo espero el momento en que alguien más aparezca y él termine por dejarme.

— ¿Has hablado con esto sobre él?

— Lo he intentado, pero él sólo cree que estoy preocupándome por nada—suspiró—Y no es así, sólo intento prepararme para cuando eso pase.

El señor Hwang suponía cual era realmente el problema. Su esposa le había dicho lo mismo hace años atrás y él tuvo casi la misma reacción. Sonrió de lado dejando la pizza en el plato, limpió sus manos con la servilleta y tomó las manos de su única hija.

— Crees que JungKook terminará dejándote por tu físico y que lo suyo sólo es diversión—resumió. Ella asintió mirándole—SooBin, ¿Tan insegura te sientes contigo misma para decir eso?

— Papá, admitamos lo obvio, no soy bonita—negó con la cabeza—No soy como las demás...

— ¿Es importante que seas como las demás? Yo te amo así.

— Eres mi padre, tienes que decirlo—sonrió un poco—JungKook es muy diferente a mí, pero él sigue diciendo que le gusto y todo lo demás, pero... ¿Por qué no me convence eso?

— Escucha, tu madre también sentía lo mismo cuando comenzamos a salir y también durante nuestro matrimonio—explicó—Te diré lo mismo que le dije a ella, siempre y cuando sigas sintiéndote así, no podrás durar con nadie en una relación, la mente de nosotros es cruel y casi no siente compasión por eso sólo confía en tu corazón, en lo que sientes.

— No lo sé.

— SooBin, no sigas algo con lo que no te sientas segura.

Y la chica supo a qué se refería eso. ¿Sería correcto terminar con JungKook?

[...]

Era una de esas prácticas para el baile, SooBin y Jiwon estaban en la cancha donde recibían educación física, veían como Nancy indicaba algunos pasos que para Soo sería el doble de cansancio, quería morirse allí. Jiwon miró a las gradas detrás de ellas notando visitas, sonrió al distinguir a los chicos, JungKook le indicó que no le dijera a SooBin quien seguía de espaldas a ellos. Era la cuarta práctica y quería ver qué tal le iba a su novia.

— Jiwon—susurró llamando su atención. Soo seguía mirando a las demás chicas, eran seis en el grupo contándola— ¿Crees que deba terminarle a JungKook?

— ¿Qué? —aquello no lo esperaba.

— Estuve hablando con mi padre, sigo sin sentirme segura conmigo misma—la miró— ¿Cómo puedo querer a alguien más?

— Oye, no te sientas así—la consoló—Ustedes dos hacen una linda pareja, él te ha tratado muy bien estos meses, ¿Cierto? Luces feliz a su lado, Soo.

— ¿Pero realmente soy feliz?

— Tienes que decirle a JungKook, ser honesta con él.

— No quiero preocuparlo, esto es un debate conmigo misma, papá tenía razón, si no puedo amarme no podré amar a nadie más—en su rostro se vio la decepción con su persona. Ninguna de las dos se percató de que una de las amigas de Nancy escuchaba aquella conversación.

Cuando la música comenzó cada quien fue haciendo sus pasos correspondientes, SooBin se vino percatando de JungKook cuando debían quedar frente a las gradas, una parte de ella no se sintió lo suficientemente feliz de verle allí.

JungKook con sólo una mirada podía decir algo que le pasaba.

La chica sabía que estaba teniendo problemas con su autoestima, como siempre. Cuando la práctica acabó fue a cambiarse en los vestidores con Jiwon regresando al uniforme escolar, al salir de ellos notó que Nancy conversaba con JungKook mientras éste lucía serio, se notaba que no estaba a gusto con su persona. SooBin sin pensarlo se acercó, pero se detuvo cuando Nancy se alejó caminando a la salida donde le esperaban.

— Creo que nosotros nos adelantaremos—comentó el chico tomando su bolso cuando todos estuvieron reunidos.

YuGyeom y TaeHyung notaron ese cambio de humor en el pelinegro. Ninguno dijo absolutamente nada.

[...]

SooBin notaba que JungKook parecía no tener intenciones de hablarle o decirle lo que pasaba, esperaban el autobús que les llevaría a casa, nerviosa y algo curiosa de lo que Nancy pudo haberle dicho no dudó en hablar.

Pero entonces JungKook lo hizo.

— Creí que era sencillo, ¿Sabes? —comentó sin verla—Creí que...lo había logrado.

— ¿Logrado que cosa?

El chico tomó su mano entrelazando sus dedos, miró los autos que pasaban por la calle jugando con su lengua por la parte interna de su mejilla. SooBin sabía qué hacía eso cuando algo le molestaba.

— No tienes que estar conmigo por obligación—reveló—No quiero que te sientas incómoda ni tampoco quiero presionarte o hacerte sentir así.

"Nancy nos escuchó"

— JungKook yo...—se calló cuando sus miradas se encontraron.

— Quiero que seas honesta conmigo, ¿Sí? —pidió—Haré lo que quieras.

— No sé lo que quiero, ese es el problema, me encanta estar contigo, pero yo...

— Te sientes insegura contigo misma—completó—Y no te culpo, tienes derecho a sentirte así.

— Lo dices como si estuvieras decepcionado de mí—soltó su mano—No soy la única que debe ser honesta aquí.

— Quiero estar contigo, te amo, SooBin, ¿Eso no es suficiente? —usó un tono de voz tan serio que daba a entender que se encontraba molesto—Dime.

— También siento lo mismo por ti...

— No, eso no me convence—bufó— ¿Me amas tanto como yo a ti?

— JungKook, esto es...—negó con la cabeza.

— Dime—siguió insistiendo. Lamentablemente la respuesta de la chica fue tan dura que dolió decirla y escucharla, Soo contuvo las lágrimas de impotencia negando con la cabeza mirando sus manos.

— Lo siento—susurró—No puedo decirlo de la misma manera que tú lo dices—se levantó recogiendo su bolso—Lo siento, JungKook.

Y al chico sólo le quedó mirarla alejarse, tuvo las ganas de correr detrás de ella, pero no lo hizo porque nadie podía obligar a una persona amarse a sí misma. Podía hacerle intentar, pero no podía obligarla.

Todo depende de esa persona amarse, respetarse y quererse a sí misma.