PROMISE •|| K S J ||• |×Pausada×|

Tanto tiempo

Park ___

Ya estando fuera de la casa de Jin, Jimin tomó mi mano, haciendo que yo siga sus pasos torpemente.

- ¿Qué pasó allí?. - Se giró a mí parando en seco sus pasos, bajé mi mirada; al recordar el beso que le robé a Jin, instalando inconscientemente el color carmín en mis mejillas. - Vamos, contesta. ¿Qué pasó allí?.

- Nada, realmente no pasó nada. Supongo que aún te acuerdas que me había “enojado” con Jin. - Hice comillas con mis dedos, Jimin asintió acordándose del día de ayer. - Bueno, pues a Jin se le ocurrió arreglar las cosas… - Me interrumpió, mucho antes de que termine mi cometido de explicarle lo sucedido.

- ¿De qué manera?. - Si antes ya estaba algo serio, ahora parecía estar molesto.

- No me interrumpas y déjame contarte lo sucedido, cuando habíamos llegado, Jin nos encerró a ambos en lo que era la habitación de huéspedes o eso parecía. Trató de disculparse pero a la primera no le salió, pero como mi lengua es peligrosa dió a entender lo que sentía por él. - Jimin me miraba atento, como si grabara cada palabra que decía y cada movimiento que hacía. - A la primera no lo entendió, hasta que con mis propios labios se lo dije, le conté sobre mis sentimientos hacia él, y que tú te habías dado cuenta mucho más antes que él. Luego de que él haya entendido, lo perdoné.

- ¿Entonces por qué te pones como un tomate?.

- Ocurrió algo más allí dentro. - Levanté mi mirada, visualizando la cara de confusión que había puesto Jimin.

- ¿Me lo quieres explicar?.

- Sí, antes de que yo misma le suelte todo el chisme de que me gustaba, lo besé.

Jimin dejó esa cara de confusión en segundo plano, su rostro no tenía expresión alguna, su mirada hacia mí era algo neutra.

- Pensé que no serías tonta.

- ¿Qué dices, piensas que soy tonta?.

- Sí.

- Jimin sólo fue un beso.

- Qué no es para tú edad, apenas tienes once años y ya andas con un picaflor, quizás no estés de flor en flor, pero sí las andas buscando. La primera fue solo un choque de labios; lo tolero, pero un beso algo más indebido ya pasan los límites.

- Déja de ser tan celoso.

- Te seré sincero, eres mi hermana, está bien que te guste alguien, pero por favor; hazte respetar.

- Y lo hice, no me dejé tocar para que me digas éstas cosas. ¿A caso piensas que soy una cualquiera?.

- ¡No vuelvas a decir eso de tí!.

- Pero dime, ¿lo piensas?.

- No, ¿contenta?.

- No llegues tarde, el primo Chan de seguro está esperando en casa.

Esquivé a Jimin, no entendía porqué tanto escándalo por un mísero beso, entiendo qué me cuide; pero él se pasa.

Seguí caminando, noté que el automóvil de mis tíos estaba frente a mi casa, saqué la conclusión de que Chan sí ya había llegado.

Tomé el pomo del portón, giré mi mirada viendo como Jimin estaba mirándome desde el mismo lugar, suspiré algo cansada y entre a casa.

Una vez ya dentro de la sala, lo primero que sentí fueron los brazos de mi primo recibiéndome.

- Te extrañé pequeña, ¿sabes?.

- Chanyeol, no hacía falta que me extrañes, de todas formas ibas a volver, cada año lo haces.

- ¿No me has extrañado?. - Hizo una especie de puchero algo adorable, suspiré y sonreí.

- Claro que lo hice, pero no hagas tanto berrinche por eso.

- No lo hago, además sabes que me cuesta convencer a papá para que me traiga hasta aquí. Mamá sigue en casa, por lo que me vengo a quedar por una semana.

Lo miré algo confundida y preocupada, las veces que se quedaba dormía en mi cuarto, colocaban una cama algo distante, pero a Jimin nunca le gustó que duerma con él.

- ¿Que tienes?.

- No, nada.

- ¿Quieres helado?, por el camino le pedí a papá que lo compre para tí.

Lo abracé, ya hacía mucho tiempo que no lo veía, realmente lo extrañaba; él es un año mayor que yo, solemos ser inseparables, cosa que tampoco le agrada a ChimChim, porque según él yo lo dejo de lado.

- Estás algo extraña, niña.

Comencé a reír y él me siguió.

- Lo sé, solo que te extrañé bastante, ChimChim se pondrá celoso nuevamente.

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No tuvo sentido el capítulo de hoy, pero como ya me tardaba en actualizar les quise dar su capítulo.