¿Y si...?

Turno de tomar la iniciativa (Calipso)

Al final no importa cuanto tiempo pospongas algo, eventualmente terminará sucediendo de la forma en que debía de hacerlo.

Mi reciente descubrimiento acerca de mis verdaderos sentimientos por Valdez ha estado dando vueltas por mi cabeza esta última semana, especialmente porque la primera cita que había tenido en mucho, mucho tiempo fue un rotundo éxito aunque claro que no utilicé ese adjetivo en específico para darle mi opinión a él, por lo menos no hasta que decidiera qué hacer con todo esto...una parte ya la tenía ganada, ya se que le gusto cosa que no es muy difícil deducir la verdad, la pregunta ahora es ¿cómo hacerle saber que a mi también me gusta? nunca he sido el tipo de chica que va por allí soltando indirectas esperando a que el chico idiota las capte y  haga algo al respecto es algo que simplemente no me va, habiendo establecido eso la respuesta más obvio es tomar la iniciativa y decírselo después de todo en cierta forma es mi turno de hacerlo, pero por alguna razón aún desconocida para mi no me atrevo a hacerlo y eso que en los últimos días las oportunidades no me han faltado, algunas veces nos interrumpieron otros campistas,en algunas otras el salía con chiste estúpido que diezmaba mis ganas de hacerlo y las pocas donde ninguna de esas dos ocurría yo terminaba arrepintiéndome ¿desde cuando esto se volvió tan difícil? dejarle en claro un chico que me gusta nunca representó un gran problema cuando estaba en Ogigia y ahora aquí me está costando un trabajo impresionante, solté un suspiro.

-Dime que ya lo hiciste por favor-me dijo Abril sentándose junto a mi en las escaleras de la casa Grande-llevas días con la idea en la cabeza.

-No aún no lo hago-admití con pesadumbre-no se porque me está costando tanto trabajo, para este punto de mi vida yo ya debería ser algo así como una experta en este tipo de situaciones.

-Yo tengo una idea de el porque te está costando tanto trabajo.

¿Cómo es que esta chica lo sabe todo? a veces realmente dudo que sea hija de Deméter tiene una faceta donde no tiene nada que envidiarle a una hija de Afrodita, sin embargo esa faceta es tremendamente útil, su amplia comprensión del amor y los sentimientos sumada con su habilidad para expresarlo de la forma adecuada me ha ayudado bastante, eso no se puede negar...y digamos que mi confesión acerca de que en efecto si que tengo sentimientos bastante fuertes por Leo Valdez no hizo más que fortalecer de alguna forma sus habilidades, está de más decir que no se contuvo de soltarme un buen y merecido ¡te lo dije!, porque en efecto si que me lo dijo.

-Soy toda oídos-le sonreí-vamos a poner a prueba tus magníficas habilidades de nuevo.

-Te está costando trabajo porque Leo no es como ningún otro chico que alguna vez haya sido enviado a tu isla-me soltó con simpleza-ni siquiera llegó allí de la forma tradicional por lo que me has contado, así que por su puesto no será tan fácil como mirarse y que el chico ya sepa que le gustas y viceversa.

-Es un buen punto...

-Aquí no hay ningún hechizo, efecto o lo que sea que hay en Ogigia para hacer esa parte del trabajo-me miró con seriedad-en estos casos las cosas se reducen a una sola palabra:iniciativa Cali, la toma él o la tomas tú no hay más.

-Eso yo ya lo sabía Ab-le recordé un poco cansada-es lo que he estado tratando de hacer toda esta semana aunque no haya logrado mucho, además...-dude un poco en decirlo nunca lo había admitido en voz alta-tengo un poco de miedo.

-¿A qué exactamente?-me preguntó sorprendida.

-A un nuevo corazón roto Ab-solté un suspiro-estoy cansada de ellos estoy segura de que ya tuve suficiente de esos por el resto de mi vida.