DERIAN ©

Episodio 57

E6: T4

¿Por qué empezó todo?

Andrew.

—Derian miente. Me está buscando, él me pidió ayuda, o algo dentro de él, pide ayuda... ¿Sabes por qué lo sé? Algo en su interior me lo dice. Lo conozco bien, y sé que ese que anda entre nosotros, no es él. —le hablaba a Yadira, mi hermana; una hermosa rubia de cabello rizado y rojizo, con solo su sonrisa sería capaz de enamorar a cualquier chico.

Es un tanto romántica, muy celosa y es muy directa. No le cuesta tener que decirle la verdad a cualquiera en su cara, además, es muy creativa y curiosa. Lo que la hace perfecta para mi nueva investigación. —¿Desde cuándo comenzó todo? —me pregunta ya en un tono más serio.

—Hace unos días atrás ya venía mal... Todo empezó cuando vino de su psicóloga ya que había tenido una de sus pesadillas nuevamente. —comenté intentado recordar.

—¿Algo de esto tendrá que ver con sus padres biológicos? Lo que creo es que su cabeza trata de recordar lo que pasó aquel día, donde dice que perdió a sus padres. —indaga. —Es muy probable que debas investigar en su casa, con sus padres, hacerle preguntas... Yo, iré a hablar con él, tú déjalo en mis manos...

—Gracias por apoyarme en esto hermana. —le suelto sonriente y motivado. Nunca me falta su apoyo. —No es nada, sé lo que significa él para ti, es lo de menos.

Todo esto me llevaba a recordar que Derian y yo siempre hemos sido muy traviesos y todo eso. A pesar de lo que yo sepa de él, nunca lo abandono. Nosotros no hacemos eso.

Él siempre ha sido muy curioso, le busca la explicación a todo eso que parece no tenerla. Es algo interesante sobre él, yo siempre le he acompañado a cosas como ésta.

Aunque no te negaré que esto quiero hacerlo solo. ¿Por qué? Porque siento que esto está relacionado con algo más grande, algo que...

Derian.

«¡Auxilio! ¡Sáquenme de aquí! ¡No puedo más! ¡Por favor!»

Caminaba hasta el consultorio de mi psicóloga. Me sentía tambaleante, con ganas de follar. Me sentía ardiente, hambriento, ya necesitaba comer de algún alma.

Camino a paso dudoso y rápido, mirando a la gente de mi alrededor como se movía. Caminando por la calle, era como si todo lo que veía, quería que fuese mío. Una horrible sensación. Me detuve. Ya había llegado al consultorio, abrí la puerta desesperado como si me estuvieran siguiendo y cerré. La mirada de mi psicóloga se giró hacia mí y rápidamente caí al piso. Me empezaba a quemar, ardía. En ese momento mi cuerpo empezó a experimentar una sensación distinta, algo más se avecinaba.

Cuando abrí mis ojos, mi cuerpo estaba sobre el de mi psicóloga, sobre su escritorio, estábamos comenzando a tener sexo sucio y duro...

♠♠♠

Ethan.

Dieciséis años atrás...

¿Cómo deducir que un momento tan hermoso podría terminar en tragedia?

La muerte del padre de Erik fue inesperada para todos, sabíamos ahora que allí fuera existían peligros que aún desconocíamos. Intentamos llevar todo lo sucedido como podíamos. No nos detuvimos, hubo boda, fuimos felices finalmente.