DESPEDIDAS DE SOLTERAS

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Fin de semana.

Viernes y sábado, perfectos días para buenas ganancias monetarias. Hará ya dos meses de ese extraño grupo que habían formado.

Una tarde de esas en las que se flojea, aburridos y sin dinero. Echados en el living de la fraternidad de la prestigiosa universidad a la que asistían, Aomine, Kagami, Kasamatsu; un Sempai que era algo... bueno muy temperamental y Kiyoshi también mayor, quien fue que comento lo que los llevaría a lo que eran ahora.

Un grupo de fuertes hombres que bailaba para mujeres.

¿Cómo fue que terminaron de esa manera? Culpemos a Kise...

Él bonachón Sempai estaba queriendo abandonar él equipo de basquet en pos de encontrar un trabajo que le dejara un poco mas dinero para su sustento; fue Kise quien alzo la cabeza de entre los naipes entre sus manos.


—Yo se de algo Kiyoshi-sempai, pero no se si le agrade... —


Él mencionado puso si atención en el animoso rubio que hablaba, haciendo que los demás también lo hicieran.


—Dime, nada pierdo por escuchar—


—Mi hermana necesita un par de chicos de buen cuerpo para una despedida de soltera, me ofrecí pero como ya soy una cara conocida en el modelaje, no me lo permitió. No seria mucho por hacer, mi hermana no permitiría cosas extrañas, la paga es buena y yo confío en usted ¿Qué dice? —


—Si ¿Qué mas da? Necesito el dinero—


Kagami se frotaba las manos mientras escuchaba al dúo hablar sobre la recién dada información. Se levanto de su lugar, llevándose a Kise a un lugar apartado.


—Oe Kise... ¿Crees que haya lugar para mi?— le hablo algo avergonzado, no es que no supiera lo que significaba aquello, ni que antes no hubiera visto a su sempai medio desnudo en las duchas del gimnasio. Necesitaba el dinero.


—Claro Kagamicchi ¿Quieres que le diga a mi hermana?—


—Si no es mucha molestia...— murmuro por lo bajo con el rostro mas colorado que su cabello


Kise no tardo en hacerlo, llamando a su hermana y esta explicándole como seria el asunto, que seria lo que haría y cuanto ganaría.
A pesar del pudor que lo embargaba no se hecho para atrás, total, si que era una buena cantidad de dinero.

Él dia del evento si que fue una sorpresa. No solo era Kiyoshi. Tanto Kagami, Kasamatsu y sorprendentemente Aomine se encontraban ahí.

Aomine le sorprendia ya que según pensaba no tenia motivos para estar ahí. Es decir, bien posicionado de dinero si estaba, así que le extraño su presencia, mas no dijo nada.
Ya que; aunque congeniaban un poco por ser el dúo as del equipo de basquet, en otros ambos eran como el perro y el gato.
Y dios lo salvara, Kagami odiaba los perros, por no decir que les temía.

Aomine siempre le veía como si quisiera morderlo, masticarlo y escupirlo al suelo y eso; en partes iguales le daba miedo y curiosidad.

No les fue muy difícil adecuarse a las coreografías. No era tan dificil. Meneo por aquí, meneo por alla y mas temprano que tarde, fuera ropa.

SEMANARIO AOKAGA #Wattys2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora