Eres de mala suerte...no Leni, no le pidas que te ayude te dará mala suerte...bueno Lincoln íbamos a salir pero por tu mala suerte debes quedarte...hijo ya no vas a poder entrar a la casa...lo ves Lynn no doy mala suerte...hijo por seguridad quedate en la cochera y si entras no te quites el traje...Lincoln ya no entres a la casa...Ya no entrarás a la cochera, te quedarás afuera, te haremos un pequeño cuarto en el patio trasero...Lincoln lo siento...
Entonces desperté de golpe, estaba sudando, desde hace meses que tengo estos sueños, pero son recuerdos hechos sueños.
Miró por la ventana de mi habitación, una casita de madera grande, tiene algunas aberturas seguro entra la lluvia, pero como hacer para acercarme, la última vez que le hablé fue hace seis meses, apesar de ser la culpable de esto él me daba una sonrisa.
Esa sonrisa me hizo sentir la peor persona del mundo, ya hace un año que está en esa condición, y yo solo ignoro todo eso, Lisa quizo ayudar pero ella es solo una niña por eso se dejó llevar por el delirio de la mala suerte.
Leni quizo saber que es lo que en realidad pasaba, pero le dijeron que Linky sufría de una enfermedad contagiosa, por lo inocente que es se lo creyó.
Las demás sí creían en la mala suerte, pero yo...soy la culpable.
No debí tratarlo así, se supone que éramos un equipo, siempre me ayudaba, yo sonreía con él. Pero tenía que perder, yo no era de perder casi nunca, de todos mis deportes que practico, pierdo tres o dos juegos por año, justo tuve que perder ese día, justo lo tuve que invitar, justo tuve que desquitarme con él, no sé por qué le hice eso.
Luego de que demostrara no tener mala suerte, creímos que el traje de ardilla era el contenedor de la mala suerte, bueno yo ya no creo en eso, ellos sí.
Después de eso lo dejaron entrar siempre y cuando se quedara dentro de la cochera, él lo hizo, pero a nuestra familia, le iba mal en todo, entonces su creencia en la mala suerte aumentó.
Tanto así que lo sacaron de la casa otra vez pero esta vez le construyeron como una casita, pero de madera, donde el tiene una cama, algo de ropa, pero siempre su traje de ardilla.
Se escuchan truenos, la lluvia se vuelve más fuerte, el viento aumenta su velocidad, solo me quedo viendo como la casita esta moviéndose, pero no podía permitir eso, no está vez.
Me levantó me pongo unos pantalones, llevo mi casaca y salgo de mi cuarto con dirección a la casita de Lincoln, ya mucho tiempo que no le hablo, voy por la puerta trasera, la abro y se siente la intensa lluvia, los fuertes vientos, los truenos, me muevo rápido, al ver la casa, me hace recordar como viven las mascotas, pero él no era ninguna mascota era mi hermano.
Al abrir, vi algo que me rompió el corazón, Linky estaba casi morado, parecía desmayado, lo toque y estaba frío, las lágrimas se me escaparon de los ojos, no era tiempo para lamentos, menos cuando él estaba en esas condiciones.
Entonces comencé a actuar, cargue a Lincoln, aún tenía ese estúpido traje de ardilla, se lo saqué, y me quedé impactada, no tenía más que un short y sin polo, revise si tenía algo para ponerse, no tenía nada, pensé solo dos segundos, tenía que llevarlo a la cochera, abrí la puerta de la cochera de una patada, al entrar estaba oscuro, pero divisé la cama en la que Lincoln dormía cuando estuvo aquí, lo eche en ella, subí rápido sin hacer ruido a mi habitación, bajé con unas toallas, lo sequé, pero el seguía sin reaccionar, puse mi oreja en su pecho, su corazón aún latía, subí otra vez y bajé con una frazada, lo tape pero seguía frío, no sabía que más hacer quería llorar más, pero recordé que mi calor corporal era quizás lo más adecuado para la situación, como lo sé, pues por una película, en fin.
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Con tanta suerte...
FanfictionLynn Marie Loud de 14 años tratará de convencer a su familia de que ella se equivocó, y dirá que Lincoln no da mala suerte, al querer ayudarlo, redescubrirá su amor hacia su hermano, y él también tendrá que revelarle algo. Los personajes le pertenec...